El Mundo - 24.10.2019

(Marcin) #1

EL MUNDO. JUEVES 24 DE OCTUBRE DE 2019
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MUNDO
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DANIEL LOZANO
Evo Morales compareció ayer muy
temprano para denunciar que en su
país «está en proceso un golpe de Es-
tado» y para decretar un estado de
emergencia que no existe en la legis-
lación boliviana. Para culminar su
estrategia, el líder del Movimiento Al
Socialismo (MAS) cantó una victoria
fantasma, ya que ni siquiera el re-
cuento electoral había terminado en
ese momento. Una cascada de acu-
saciones contra la oposición, que
contaría con ayuda extranjera en su

objetivo de sacarle del poder, según
el discurso presidencial.
«Hasta ahora hemos aguantado y
soportado con paciencia para evitar
la violencia», aseguró el presidente,
pero ya es hora de «defender la de-
mocracia que ha costado sangre re-
cuperar», para lo que llamó a sus se-
guidores a mantenerse alerta «en es-
tado de emergencia y movilización
pacífica». Una forma muy revolucio-
naria de escalar en el conflicto, ya
que la Constitución sólo hace refe-
rencia al estado de excepción.

No fue el único desliz constitucio-
nal del presidente, quien se dio por
ganador antes de tiempo («Ganamos
democráticamente, ganamos en seis
departamentos, tenemos mayoría
absoluta en senadores y diputados»),
lo que provocó la amonestación de la
misión electoral de la Organización
de Estados Americanos (OEA).
Transcurridos casi tres días del cie-
rre de las urnas, el conteo se volvió a
paralizar al 96,78% del escrutinio, en
un momento que ni siquiera otorga
el triunfo al candidato revoluciona-

rio: Morales necesita una ventaja de
10% sobre su rival para no acudir al
desempate, pero en el nuevo frenazo
sólo aventajaba al opositor Carlos
Mesa en 9,48 puntos.
Reunida en sesión extraordinaria,
la OEA apostó por la realización de
la segunda vuelta electoral en di-
ciembre, conclusión a la que llega
después de un informe muy duro.
«La misión pudo constatar que va-
rios de los principios electorales
(transparencia, legalidad, certeza,
equidad, independencia e imparcia-

lidad) han sido vulnerados por dis-
tintas causas», señala. La organiza-
ción panamericana está dispuesta a
llevar a cabo una auditoría sólo si sus
conclusiones se aceptan como vincu-
lantes por ambas partes.
En términos aún más contunden-
tes se pronunció el candidato Mesa,
indignado por la «increíble acusa-
ción (liderar un golpe de Estado). Si
hay alguien que rompe sistemática-
mente el orden constitucional se lla-
ma Evo Morales. El presidente con-
trola y ordena todos los poderes del

Estado», arguyó el líder de Comuni-
dad Ciudadana, que también sufrió
desde Caracas el ataque directo de
Nicolás Maduro, principal aliado
continental de Evo. «Está claro que
hay un fraude gigantesco en marcha.
Vamos a presentar los elementos pa-
ra demostrarlo en las próximas ho-
ras. El pueblo boliviano no tiene nin-
guna duda de la forma grosera de re-
vertir los resultados para eliminar la
segunda vuelta», añadió Mesa. Su
candidatura niega que los votos que
faltan por escrutar provengan todos
del campo, como dice el presidente.
La dimisión de Antonio Costas, vi-
cepresidente del Tribunal Superior
Electoral (TSE), al considerar que se
había desacreditado todo el proceso
electoral, atizó aún más las protestas.
En sus últimas declaraciones, Costas
desveló que el TSE decidió dejar de
publicar los resultados, aunque si-
guió procesándolos en silencio.
Mientras tanto el paro cívico se
extendió ayer por seis de los nueve
departamentos, aunque fue en San-
ta Cruz, capital económica del país y
bastión de la oposición, donde más
se dejó sentir. Un grupo de protes-
tantes prendió fuego a la sede del
Tribunal Electoral Departamental y
al edificio del Registro Civil.

El indígena que sucumbió a las mieles del poder


Candidato presidencial de Bolivia. Este aymara de origen humilde es el mandatario actual
más longevo del continente, aunque ya no suscita las pasiones de sus inicios. Apoltronado en el
cargo, aspira a mantenerse más allá de 2025, aunque para ello tenga que ‘patear’ a sus enemigos

EVO


MORALES


D. L.
Cuando el primer presidente indí-
gena de América Latina nació en
octubre de 1959 estaba destinado a
llamarse Evaristo. Así lo establecía
el «calendario pintoresco de Bris-
tol», tan en boga en aquella época
para otorgar nombres de santos ca-
tólicos a los recién nacidos. Pero a
Dionisio Morales no le gustaba la
idea, aquel nombre era demasiado
largo para su hijo varón. Como si
algo le dijera que aquel bebé que
luchaba por sobrevivir desde antes
de nacer, algo que no consiguieron
los dos hermanos que le precedie-
ron, necesitaba un nombre sonoro

e impactante para cambiar el desti-
no de su nación.
Así que optó por Evo, la versión
más corta del nombre inicial. Las
peripecias de su nacimiento y bau-
tizo las describe el propio líder ay-
mara en su autobiografía, Mi vida,
de Orinoca al Palacio Quemado, un
largo relato de cómo la vida se con-
fabuló con la política para empujar-
le hasta la Presidencia de su país,
un puesto hasta entonces vedado
para los indígenas. Hoy, 60 años
después de su nacimiento y trans-
curridos 14 de su primer triunfo
electoral, el nombre de Evo, el man-
datario actual más longevo del con-

tinente, ya forma parte
del abanico de nombres,
tan cortos e impactantes
como el suyo pero que
tanto han cambiado la
Historia de la región: Fi-
del, Lula, Raúl...
Lo más paradójico es
que en la actualidad no
queda mucho de aquel
Evo, el que alcanzó al po-
der desde la dirigencia cocalera de
los Andes bolivianos, en pugna con
los poderes de toda la vida de un
país sumido en la pobreza. Un giro
inesperado para una Bolivia con pre-
sidentes que hablaban con un acen-

to tan gringo que ni se
les entendía.
Un simple vistazo al
todopoderoso presiden-
te le acerca más a Eva-
risto, decidido a perpe-
tuar su nombre en el po-
der, alargarlo a la fuerza
incluso más allá de 2025,
cuando vence la próxi-
ma legislatura. Si hay un
punto de inflexión, ése sucedió en
2016, cuando perdió el referéndum
para cambiar la Constitución. «Los
que dijeron sí (48,7%) es para que si-
ga Evo. Los que dijeron no (51,3%)
es para que no se vaya Evo», señaló

el presidente, como si quisiera pla-
giar a su amigo Hugo Chávez.
Nada queda en el aburguesado
Evo de hoy de la humildad de enton-
ces («No conocí la ropa interior has-
ta los 14 años»), olvidada por los dis-
pendios que acompañan a los líderes
populistas del continente, cuya prin-
cipal salvaguarda es la bonanza eco-
nómica que disfruta el país andino.
Bonanza nacida de la nacionaliza-
ción de los recursos del gas y de una
administración eficaz de las cuentas
públicas, bajo la tutela de su inefable
vicepresidente, García Linera, cere-
bro gris de la Administración del
Movimiento Al Socialismo (MAS), y
del ex ministro Luis Arce. Morales se
gusta apoltronado en el poder, tan
protegido que no duda en patear sin
disimulo a quien le presiona, ya sea
en una de esas habituales pachangas
de fútbol, en una partida del ajedrez
político o en las propias elecciones,
como parece querer confirmar tras
los sospechosos manejos electorales.

Manifestantes corriendo durante la huelga general convocada por los sectores de la sociedad contrarios a la reelección de Morales, en Santa Cruz (Bolivia). EFE


Evo Morales se proclama vencedor


El presidente boliviano denuncia un «golpe» y decreta el estado de emergencia en el país


96 %


Del escrutinio de
votos. Es la cifra en
la que se volvió a
paralizar el recuento
en las elecciones de
Bolivia del domingo.

REUTERS
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