National Geographic Viajes - 09.2019

(ff) #1

Durante todo el verano y el otoño,
del puerto de Tadoussac zarpan
barcos a diario para avistar desde
ballenas jorobadas hasta azules,
así como varias especies de delfi-
nes. Otra opción consiste en rea-
lizar una salida a bordo de una lan-
cha zódiac o en kayak.


El río Saguenay fluye por el fiordo
más al sur de toda Norteamérica.
Se formó a finales de la última gla-
ciación, hace más de 10.000 años,
cuando la presión del hielo labró
una brecha enorme sobre la gran
masa rocosa. El fiordo destaca por
sus aguas oscuras, de hasta 300 m
de profundidad, que avanzan unos
155 km entre acantilados de casi
300 m de altura. Debido a estas di-
mensiones, cruceros de porte oceá-
nico penetran río adentro hasta el
pequeño municipio de La Baie.


Igual que los cruceros, nosotros
nos proponemos remontar el río
Saguenay hasta el lago St-Jean pa-
ra disfrutar del bello paisaje que
discurre por las márgenes, inten-
tando descubrir si alguna ballena
se ha animado a dejar el cauce del
San Lorenzo por el del Saguenay.
En la orilla occidental se asoma
el Cap-Trinité, un acantilado de
320 m desde donde se disfruta de
una maravillosa vista sobre el fior-
do. Poco después de dejar La Baie,
a 25 km hacia el interior, aparece
la mayor ciudad de toda la región
del Saguenay, Chicoutimi. Este
centro urbano, con una población
que supera los 100.000 habitan-
tes, fue siempre conocido por sus
industrias papeleras. Hoy tiene un
centro histórico completamente
restaurado con múltiples atracti-
vos para el turismo.

Con sus 230 km de perímetro, el
Lac St-Jean es un destino estival
muy popular entre los habitantes
de las ciudades de Quebec y Mon-
treal. Constituye un verdadero
oasis de tranquilidad, agazapado
bajo los enormes bosques de abe-
tos que cubren todo el centro de
la provincia. Pequeños pueblos
como Chambord y varias playas
circundan este lago de aproxima-
damente 1000 km^2 , instalado en
un antiguo cráter que alimentan
múltiples arroyos antes de des-
aguar en el Saguenay.
El lago St-Jean es perfecto para
nadar, acampar en sus playas y dar
largos paseos junto a sus orillas. A
lo largo de todo el año acoge diver-
sos festivales, especialmente en
verano, como en el que tiene lugar
en el pueblo de Dolbeau, con ro-
deos al más puro estilo del Oeste.

En verano, el último tramo
del río San Lorenzo es un
lugar de apareamiento para
varias especies de ballenas.


ALBERTO BISCARO / FOTOTECA 9X12
Free download pdf