2 ExpansiónMartes 20 agosto 2019
DIRECTIVOS EN VERANO
M. Prieto. Madrid
Las empresas españolas se enfren-
tan al reto de aprovechar las oportu-
nidades que brinda el Internet de las
Cosas (IoT por sus siglas en inglés),
es decir, un entorno en el que los ob-
jetos pueden conectarse a Internet
para recoger, enviar y recibir datos.
En el ámbito empresarial, los benefi-
cios se han centrado principalmente
en una mayor productividad, auto-
matización de procesos y reducción
de costes de mantenimiento.
“El ecosistema del IoT en España
es muy prometedor, pero aún hay
mucho potencial por explotar. Mu-
El despegue definitivo
del Internet de las Cosas
CASOS PRÁCTICOS La sensorización permite mejorar la eficiencia operativa.
TECNOLOGÍA
El Internet de
las Cosas (IoT)
es una herramien-
ta para mejorar
la eficiencia
operativa de las
organizaciones.
En España, muchos casos
aún no pasan de la fase
piloto, por lo que hay
mucho potencial
La ciberseguridad
es el mayor obstáculo
en la adopción de esta
tecnología en la empresa
chos casos no pasan de la fase piloto:
falta que las empresas den el salto.
Sin embargo, la tecnología necesaria
para cubrir las necesidades de las
empresas ya existe y es escalable”,
explica Rebecca Crowe, managing
director de Sigfox España, provee-
dor de esta tecnología.
Según un estudio de la consultora
Bain & Company, Europa supera a
Estados Unidos en el uso industrial
del Internet de las Cosas, con una
implementación tres veces mayor.
Según este informe, la ciberseguri-
dad es el mayor obstáculo en su
adopción.
Seat está utilizando ampliamente el IoT con
el objetivo de tener una mejor gestión y control
de la fábrica de Martorell. Esta tecnología
permite monitorizar dispositivos e instalaciones,
generar un sistema de alertas tempranas con
relojes inteligentes, localizar coches y puertas
inteligentes, usar cortacéspedes autónomos,
emplear drones para realizar inspecciones
y desplegar más de 250 vehículos guiados
automáticamente que permiten transportar
motores, cajas de cambio, etc. “Estamos
trabajando en un sistema de localización en
tiempo real de nuestras carrocerías, mejorando
la flexibilidad del proceso de fabricación”,
explican en la compañía. La revisión de
electrovías mediante visión artificial o la
monitorización de los diferentes equipos de
protección individual de los empleados
conjuntamente son otros de los proyectos en los
que está embarcada. La compañía analiza
simultáneamente grandes cantidades de datos
heterogéneos (cerca de cinco millones al día),
provenientes de diferentes orígenes como
sistemas de control e instalaciones: robots,
motores, bombas, instalaciones de pintado,
climatización, etc. “De esta manera, podemos
anticiparnos a posibles problemas y establecer
los parámetros ideales para optimizar el proceso
productivo”, explican desde el fabricante
de automóviles.
Seat: Aplicación en Martorell
La bodega vallisoletana
Emilio Moro ha
instalado una red de
sensores en los viñedos
cuyos datos se
combinan con las
imágenes
multiespectrales de alta
resolución capturadas
por satélite durante
todo el ciclo de la
cosecha. El proyecto,
realizado con Vodafone,
integra tecnologías
como Internet de las
Cosas (IoT), ‘big data’ e
la inteligencia artificial.
Gracias a este
despliegue de sensores, se pueden medir factores clave como
la temperatura, la humedad, la absorción de agua o la salud
de la vid. Mediante el empleo del ‘big data’ y de algoritmos de
inteligencia artificial, se realizan análisis predictivos sobre la
cosecha, lo que permite tomar decisiones en aspectos como el
riego, abono, poda o momento óptimo de la cosecha.
Emilio Moro: Análisis
predictivos de las cosechas Urbaser usa el IoT para gestionar la
flota de vehículos, los procesos
industriales de sus plantas de
tratamiento de residuos y agua, y
otros activos como los contenedores
de residuos. Al poder hacer
seguimiento de vehículos y
contenedores de basura por medio de
los sensores y la posterior transmisión
de información a la plataforma cloud
de Microsoft Azure, es posible crear
sistemas de información en tiempo
real. Estos sistemas son utilizados por
los gestores de los servicios urbanos
para optimizar los recursos dedicados
a todas las tareas. Así, la compañía
puede mejorar las rutas de
recolección, reducir el nivel de ruido y
disminuir el consumo de combustible
y las emisiones de gas.
Urbaser monitoriza sus activos
Trasmediterránea emplea el
Internet de las Cosas en varios
proyectos. Por ejemplo cuenta con
una solución de ‘tracking’ de
remolques, plataformas y
contenedores basada en dispositivos
de bajo consumo conectados a la red
del proveedor Sigfox. Con un módulo
GPS, la naviera española puede
localizar sus activos prácticamente en
tiempo real y con precisión, recibiendo
alertas automáticas en caso de
extravío o robo, con información
detallada y fiable del conductor
y vehículo asignados o las rutas,
explican en Sigfox. La compañía debe
gestionar un gran número de activos
en múltiples centros logísticos y,
anteriormente, la introducción manual
de datos en su ERP podía dar lugar a
errores humanos y dispersión de la
información.
‘Tracking’ en Trasmediterránea