M ANE JO INTE G R ADO DE P L AG AS Y E NFE R M E DADE S (M IPE)
Como en todos los cultivos, se pueden presentar problemas fitosanitarios (enfermedades y plagas) que
pueden afectar la producción y rentabilidad del mismo. Sin embargo, muchas de las enfermedades y las
plagas se pueden prevenir si se hace un buen manejo del cultivo. Para esto, se requiere establecer un
MIPE, pero se requiere indagar y conocer aspectos básicos:
- Agente causal (Plaga o enfermedad).
- Condiciones climáticas.
- Susceptibilidad de la planta al ataque de la plaga.
El MIPE consiste en una serie de estrategias orientadas al manejo de plagas y enfermedades, que
incluyen las decisiones que se toman para su prevención y control, cuyo enfoque comprenden cuatro
etapas:
- Determinar umbrales de acción
- Monitorear e identificar plagas
- Prevención
- Control
A partir de estos datos, se tienen las herramientas necesarias para tomar la decisión del tipo de control
a aplicar, cuándo y cómo con miras a conservar la calidad y la rentabilidad del ejercicio de producción
(IICA, 2016).
E N FE R M ED A D E S Y SU M A NE J O
Las enfermedades están entre los factores más limitantes de la productividad y longevidad de la
plantación. La incidencia de estas enfermedades varía dependiendo del país y región.
P U D R I CI ÓN D E L A R A Í Z ( A G E N TE CA U SA L : p h y to p h thor a c i nn am o m i ra nd s )
Phytophthora cinnamomi es la enfermedad de mayor importancia en el cultivo de aguacate en el mundo
(Zentmyer et al., 1994), causa pudrición de raíces en todas las edades y se desarrolla de forma más
rápida en suelos pesados con alto contenido de arcillas fácilmente encharcables. Afecta las raíces más
nuevas y finas, las cuales se tornan de color café-negro, la corteza de las raíces se desprende fácilmente
aun cuando las raíces no presentan necrosis, estas raíces posteriormente mueren. Al examinar las raíces
secundarias, presentan necrosis parcial. La muerte del árbol se puede tardar desde unos pocos meses
hasta 2 o 3 años. En los estados iniciales de la enfermedad, las raicillas mueren y se pudren, por lo cual
es difícil hallar raíces normales en árboles enfermos. Las raíces primarias y secundarias no presentan
síntomas y son poco afectadas (ICA, 2012).En estados avanzados, el daño se observa en las raíces principales, secundarias y el cuello,
extendiéndose en el tronco del árbol hasta unos 50 cm aproximadamente. Se generan grandes áreas
afectadas de tono marrón oscuro y necrótico, de poca profundidad en el leño. La falta de raíces nuevas
y pelos absorbentes evita la toma de agua, en consecuencia, el suelo bajo las plantas enfermas tiende
a mantenerse húmedo (ICA, 2012).Foto: ICA, 2012