Cuando hablamos de Carabanchel queda atrás
ese pasado de barrio conflictivo y abandonado.
Desde hace años estamos viviendo un cambio
del tejido social y cultural que está colocando a
Carabanchel a la cabeza de la creación artística
de la ciudad.
Hablamos del distrito con más locales de en-
sayo y profesionales de la música de Madrid,
desde amateur hasta grupos profesionales, sa-
las de conciertos y escuelas de música.
Hablamos de sus salas de teatro, escuelas de
formación y proyectos teatrales, que dinami-
zan al barrio con un trabajo de calidad para todo
tipo de públicos.
Hablamos de literatura, con sus más de 20 li-
brerías y asociaciones dedicadas a potenciar y
crear contenidos literarios para nutrir de cultu-
ra a sus habitantes.
Hablamos de creación plástica, audiovisual y
artística, cuna de creación de un gran número
de artistas. El aprovechamiento e iniciativa de
las y los artistas ha convertido zonas industria-
les deprimidas en nuevos núcleos de empren-
dimiento y desarrollo de ideas e iniciativas au-
daces.
Y, por supuesto, cuando hablamos de Caraban-
chel hablamos de su movimiento asociativo,
vecinos y vecinas que trabajan por crear ba-
rrios mejores sin pedir nada a cambio.L
a pandemia nos cambió la vida. El encie-
rro de semanas nos obligó a preguntarnos
dónde queríamos vivir realmente. Se dice
de la población madrileña que no tiene
identidad, nos la da el pueblo o el barrio. Ahora
sabemos que pertenecemos al lugar del que nos
sentimos parte. Y ese es el Carabanchel del que
hablamos, un distrito de barrios, un lugar habita-
ble para sus vecinos y vecinas, un punto caliente
en el mapa de Madrid, una comunidad con arrai-
go en el territorio y esperanza en el futuro.De qué hablamos
cuando hablamos de
Carabanchel
Hablamos de uno de los distritos más poblados de
todo Madrid, de sus 260.000 carabancheleros que
viven, trabajan, crean y disfrutan en sus barrios,
porque ser de Carabanchel es un orgullo que se
lleva dentro. Un distrito multicultural con un 23%
de población extranjera. Un distrito familiar que
cuenta con más de 37.000 niños.Si yo fuera barrio,
sería un barrio de
Carabanchel