Al paso del tiempo

AGUACERO
Cae sin anegar penas
vociferante y severo,
inunda y llena las venas,
chaparrea el aguacero.
No es tan intensa la aguada
ni tan adverso el tormento
ni tan triste la posada
ni tan profundo el lamento.
Quiero, digno y elegante,
que bendigas al coplero
que colmes mi alma tunante
que me limpies el sendero
que dignifiques galante
mi espíritu aventurero.