duro que perdió un fragmento. Ahora está incompleta.
Me pone tan triste. A pesar de estarlo, nunca ha dejado de brillar, eso es lo que
me da fuerzas para levantarme al día siguiente. Si encontrara su otra mitad, sé que
podría repararla. Me gustaría poder hacer algo bonito por ella.
Es mi brújula en la oscuridad.
Al despertar, me encanta ver el amanecer. Mi estrella se ha alejado. Recuerdo lo
brillantes que eran aquellos tiempos, duraban poco, aun así, eran lo que más amaba.
Ahora él se está apagando, es una pequeña chispa, creo que también se siente solo.
Supongo que piensa que nadie necesita su luz. Si supiera que estoy aquí, cuanto lo
extraño. Quizá volvería.
Quiero gritarle cuán importante es. Lo he intentado, pero no tiene caso. Está lejos,
no escucha.
Antiguamente, suponía que mi pequeño mundo era mi refugio. El hogar a acudir
ante la tormenta. Cuando estuviera dentro, nada podría hacerme daño. Lo construí
de pequeños momentos, por qué son justo esos los que más perduran, pero me
estaba engañando, puedes esconderte tanto como quieras, ¡nunca! escapar de ti
mismo. ‟Si voy a reparar mi mundo, también debo construir”