Al día siguiente, todos se reunieron en la sala de operaciones.
Morgan tuvo una larga charla con Cloe, Abigail, Zilak y Susan. Él les
explicó todo lo que había ocurrido en esos últimos cuatro años. También les
relató la historia de Caluti y la conexión que este tenía con Boldort y sus
padres. Al principio los señores Socich se mostraron incrédulos, sin
embargo, luego de reflexionar acerca de la situación de Limaria y de
Lamkar, no tuvieron más remedio que creer en sus palabras.
La robot Sully había devuelto sus ropas a los huéspedes, y los chicos
volvieron a utilizar sus mismos atuendos, pero ya completamente limpios.
Morgan llevaba una sudadera negra y pantalones oscuros, con la pulsera de
grafeno que Lu le había regalado. El gemelo todavía vestía su campera azul,
mientras que Kun tenía puesto una remera sin mangas de color granate y
unos pantalones negros.
Lucas, por su parte, estaba usando un pantalón y una chaqueta verde
con botas negras. Sully también se encargó de reparar los drones y calibrar
las armas que los chicos habían recolectado el día anterior. De hecho, Sam
le hizo algunas modificaciones a la robot para que esta pudiera realizar esas
reparaciones.
Esmeralda presidía la reunión, ella estaba de pie frente a una mesa
larga y con un control remoto en la mano, mientras que los demás se
hallaban sentados en sus respectivos asientos. Morgan se ubicaba al lado de
Cloe, a un extremo de la mesa, en tanto los gemelos, Kun, Belton, Cleman y
Návila se encontraban a un costado de esta. Por otra parte, Samuel, Abigail,
Zilak y Susan, estaban al otro lado de la mesa.
Todos observaban a Esmeralda con total seriedad en sus rostros; ni
siquiera Lucas se atrevió a hacer algún tipo de comentario gracioso,
sabiendo que estaban a contra reloj, y que cada minuto que pasaba suponía
una gota de sangre más en Eumaria.
La chica suspiró profundamente, e inclinando la cabeza, miró hacia
una enorme pantalla ubicada al costado. Ella extendió levemente el brazo,
luego pulsó un botón y el monitor proyectó varias imágenes; estas eran del
bosque, la playa prohibida en Gani, y unos planos arquitectónicos en 3D.
—Escuchen, ayer estuve buscando por horas algún indicio o pista
que Boldort nos hubiera podido dejar, y después de tanto indagar, pensé que