Expansión - 27.01.2020

(Barry) #1

EMPRESAS


4 ExpansiónLunes 27 enero 2020


COMIENZA EL BREXIT LA ESTRATEGIA DE LAS COMPAÑÍAS


En la última presentación del plan


estratégico ante inversores, en febrero de


2019, Iberdrola explicaba que “un duro


Brexit no tendría un impacto material


inmediato directo” en la actualización de


ese plan, para 2019-2022, “excepto por la


conversión de moneda”, que en todo caso


“estaba cubierta para 2019”.


“Los incrementos en el tipo de cambio


impactarán en la traslación futura de


resultados, aunque 2019 ya está cubierto”.


La próxima presentación del plan


estratégico, a diferencia de otros años,


no será en febrero. Se ha aplazado hasta


el 13 de mayo. Para entonces, ya habrá más


visibilidad sobre el impacto del Brexit. Con


todo, Iberdrola nunca ha ocultado que este


puede “afectar de forma adversa a las


condiciones económicas en Reino Unido”,


donde controla Scottish Power. En todo


caso, el grupo continúa expectante y


“monitorizando la evolución de los


mercados financieros con objeto de tomar


las medidas de cobertura oportunas”.


Iberdrola, “cubierta” pero “alerta”


Ana Botín, presidenta de Santander.


Bloomberg News


El banco, que aterrizó hace 10


años en el país con la compra


de Abbey National, no


atraviesa su mejor momento


allí. Santander ha rebajado la


valoración de su filial en 1.


millones por el Brexit y otros


factores asociados. El banco


necesita cubrir la cuenta


de resultados de un posible


menor crecimiento


económico del país tras


la salida de la UE. El aumento


de la competencia en Reino


Unido ha elevado la presión


sobre los números, así como


la ley inglesa que obliga a


separar el negocio minorista


del negocio de banca de


inversión puesto que reduce


la rentabilidad, según los


analistas. Santander UK


redujo en 2018 un 20%


su red de oficinas.


Santander está en fase


de repliegue en Reino Unido


El gestor aeroportuario cree


que existe una “probabilidad


cero” de una interrupción


abrupta de los vuelos en los


aeropuertos españoles tras el


Brexit. En este caso, el trabajo


corresponde a las aerolíneas,


y más a Iberia, Vueling y


British Airways, integradas en


IAG, que a easyJet, que ya se


ha anticipado trasladándose


parcialmente a Austria.


En España, los aeropuertos


de Aena están preparados


para adaptar sus flujos de


pasajeros, maletas, seguridad


y animales a un escenario sin


acuerdo. Donde puede tener


más problemas es en Luton,


aeropuerto del que controla


el 51%. “La actividad podría


verse reducida como


consecuencia de las


limitaciones a la libre


circulación de personas [una


potencial exigencia de


visados] o por la evolución


económica de Reino Unido,


teniendo en cuenta que un


alto porcentaje de su tráfico


es internacional”, expuso en


su última memoria el grupo


presidido por Maurici Lucena.


Un 16,7% de los pasajeros de


Aena en 2018 tuvo su origen o


destino en Reino Unido, país


que generó el 5,4% de sus


ingresos ese año.


Aena, pendiente de Luton y de IAG


Maurici Lucena, presidente de


Aena.


Josep Oliu, presidente de Sabadell.


Dreamstime

El Brexit no entraba en los


planes de Banco Sabadell


cuando adquirió TSB,


pero siempre ha manifestado


que el impacto en su filial


británica será relativo


y que están preparados para


afrontar la nueva etapa.


La clave reside en que TSB en


un banco local, centrado


en banca de particulares,


por lo que seguirá prestando


servicio a los británicos


con o sin Brexit. Solo se vería


afectado si Reino Unido


entrara en recesión, ya que se


resentiría su inversión


crediticia y podría aumentar


la mora hipotecaria. TSB


acaba de activar un nuevo


plan estratégico que prevé


cerrar 82 oficinas y elevar el


beneficio a 130 o 140 millones


de libras en 2022.


Sabadell, centrado


en la rentabilidad de TSB


ACS tiene en Reino unido


un alto porcentaje de cartera


de producción asociada a su


actividad constructora, tanto


civil como industrial. La


compañía española es uno de


los grandes proveedores en el


capítulo de infraestructuras


de transporte. Ha participado


en la construcción de la


conexión ferroviaria Crossrail,


que une Heathrow con la


capital. La firma española


participó, principalmente, en


las obras de tunelación. ACS


también forma parte


de la lista de contratistas


encargados de desplegar la


alta velocidad en Reino Unido.


Entre sus proyectos más


relevantes destaca una de las


dos estaciones de Londres, en


Euston, valorada en 2.


millones de euros. A través


de Cobra es un proveedor


de referencia en el despliegue


de red eléctrica y también


participa en el desarrollo y


explotación de tecnología de


energía renovable. En Escocia,


lidera un proyecto para la


construcción de un parque


eólico off-shore de 50 MW


que requiere de inversiones


por unos 450 millones de


euros. El Brexit, en principio,


no va a alterar esta agenda


de trabajo en el país.


ACS, construcción y renovables


Florentino Pérez es el presiden-


te de ACS.


Tobías Martínez, consejero delegado de Cellnex.


Cellnex ya estaba presente


en Reino Unido desde 2016,


pero ha sido a finales de 2019


cuando ha tomado


una posición relevante con


el acuerdo de compra


de 7.400 torres a Arqiva


por 2.000 millones de libras,


unos 2.370 millones de euros.


Para protegerse de las


fluctuaciones de las divisas


entre la fecha del acuerdo y el


cierre, que se producirá este


verano, el grupo ha suscrito


un seguro. En cualquier caso,


el negocio de las torres está


pactado con sus clientes, los


operadores, en contratos


a largo plazo, de entorno


a 20 años, por lo que la


incertidumbre del impacto


del Brexit sobre el negocio


británico de Cellnex


es mínima.


Cellnex hace de Reino Unido


su cuarto mercado


Ignacio Sánchez Galán preside Iberdrola.


En mayo de 2016, recién aterrizado


en la presidencia de Telefónica, José María


Álvarez-Pallete recibió la mala noticia


de que Bruselas vetaba la venta de O2,


su negocio británico, a Hutchison. Tres


años y medio después, en noviembre,


Pallete decidió convertir a la filial del Reino


Unido en una de las cuatro piezas básicas


del grupo, junto con España, Brasil y


Alemania. Hutchison valoró O2 en 10.


millones de libras (12.147 millones de euros


al cambio actual), y Telefónica ha pensado


en muchas ocasiones sacarla a Bolsa, pero


la propia incertidumbre por el Brexit ha


frustrado sus planes. La filial, que es la


cuarta por tamaño del grupo, atraviesa una


buena fase, con crecimientos del 4,7% en


ingresos (hasta 5.184 millones de euros) y


del 6,2% en ebitda –alcanza los 1.


millones–. Telefónica no prevé que la salida


de Reino Unido de la UE rompa el acuerdo


de roaming que afecta a todos los países


comunitarios y que permite pagar los


mismos precios que el mercado de origen.


La filial de Telefónica crece a buen ritmo


José María Álvarez-Pallete preside Telefónica.

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