Las tasas de mortalidad calculadas a partir del total de defunciones registradas en una zona geográfica
específica se denominan tasas brutas de mortalidad. Dado que la edad es el factor de confusión, se usa
una población estándar para eliminar los efectos de cualquier diferencia en la edad entre dos o más
grupos de la población. Estas técnicas se llaman tasas de mortalidad estandarizadas o ajustadas por la
edad. Las tasas ajustadas por la edad son tasas artificiales, empleadas solo para hacer comparaciones.
La tasa real para una zona geográfica específica es la tasa bruta. Cuando se elaboren cuadros, deben
calcularse ambas tasas. La selección de la población estándar hipotética es algo arbitraria, por lo que se
recomienda emplear una población externa. Cabe destacar que la experiencia internacional indica que,
una vez que se adopta una población estándar, debe emplearse por decenios (9). El uso de poblaciones
estándares disímiles no permite comparaciones de las tasas en el tiempo. Por lo tanto, la OPS usa la
nueva población mundial estándar de la OMS (2000-2025) en el cálculo de las tasas ajustadas por la
edad (usando el método directo), con el fin de facilitar comparaciones a nivel mundial. Se espera que los
Estados Miembros de la OPS usen la población estándar de la OMS.
2.4.6 OTROS FACTORES
El uso de diferentes definiciones de casos, criterios diagnósticos o clasificaciones de las enfermedades
también puede comprometer la posibilidad de usar el indicador para hacer comparaciones entre
poblaciones. Por ejemplo, las tasas de mortalidad hospitalaria de nacidos vivos pueden resultar
fuertemente afectadas por el tipo de establecimiento (si se trata de un hospital general o un hospital
de alto riesgo, por ejemplo). En ese caso, el uso de la estratificación de las tasas por peso al nacer o
por riesgo durante el embarazo podría ayudar a una comparación más adecuada. La undécima revisión
de la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades se presentará en el 2018. Por lo tanto, los
usuarios y los que generan indicadores deben tener sumo cuidado con la transición entre la CIE-10 y la
CIE-11 con respecto a la comparación de los indicadores en el tiempo. Estos riesgos pueden minimizarse
cuando se adoptan los criterios de correspondencia que muestren la equivalencia entre la CIE-10 y la
CIE-11.