LIBRO DE LA SALUD CARDIOVASCULAR
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Actualmente, las imágenes obtenidas se almacenan
utilizando diversos soportes informáticos para posterior-
mente evaluarlas con mayor detenimiento y archivarlas.
Efectuado el estudio, se retiran los introductores y se com-
prime la zona de punción para obtener el cierre por coagu-
lación del pequeño orificio creado en la arteria. Se realiza
un vendaje compresivo de la zona y el paciente debe per-
manecer en reposo durante varias horas; si no se presentan
complicaciones puede ser dado de alta.
Riesgos del procedimiento
La coronariografía es un procedimiento mínimamente
invasivo y presenta una baja incidencia de complicaciones.
Los riesgos se incrementan con la edad y fundamental-
mente con la gravedad de la patología de base. La edad
por encima de los 75 años, la diabetes, la insuficiencia renal
y la enfermedad coronaria o valvular grave incrementan
los riesgos.
No obstante, como en cualquier intervención, se
puede producir una serie de efectos adversos:
- La complicación más grave es la muerte durante
el procedimiento, cuya probabilidad es de 1-2 por
cada 1.000 procedimientos, asociada a pacientes
con enfermedad coronaria grave o con múltiples
patologías. - Alergia a algunas de las sustancias empleadas. Las
reacciones alérgicas, generalmente secundarias
al contraste radiológico utilizado, son infrecuen-
tes y, la mayor parte de las veces, imprevisibles,
salvo si se ha presentado reacción previa a la
misma sustancia. En general, se trata de reaccio-
nes leves y de fácil manejo. Las reacciones graves
son muy raras. - Hipotensión y enlentecimiento del ritmo cardíaco
(habitualmente pasajeros). - Complicaciones vasculares locales, consistentes
en hematoma o sangrado excesivo en el lugar
de la punción. En esta zona puede quedar una
leve molestia dolorosa, pero nunca dolor al
caminar o en reposo, o algún bulto pulsátil dolo-
roso. En esos casos es aconsejable consultarlo
inmediatamente con el médico que realizó el
procedimiento. - Otras complicaciones más raras son: arritmias gra-
ves (que requieren choque eléctrico o marcapasos),
accidentes cerebrovasculares (embolia cerebral),
infarto agudo de miocardio o alteración del funcio-
namiento de los riñones.
A pesar de las complicaciones comentadas, hoy en
día la coronariografía es una exploración de rutina, con muy
baja incidencia de complicaciones y muy rentable desde el
punto de vista médico por la información que aporta y los
beneficios que va a suponer para el paciente.
Mediante la coronariografía se puede estudiar la anatomía de las
arterias coronarias. En estas imágenes aparecen opacas las arterias
coronarias derecha e izquierda.