LIBRO DE LA SALUD CARDIOVASCULAR
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cardiológicos no invasivos son anormales (electrocardio-
grama, ergometría, ecocardiograma...). En pacientes que
van a ser sometidos a cirugía valvular se recomienda la
realización de una coronariografía si existe sospecha de
enfermedad coronaria o a partir de una determinada
edad. Otras indicaciones para efectuar esta técnica son
la presencia de insuficiencia cardíaca izquierda de etio-
logía u origen desconocido y tras la recuperación de una
parada cardíaca.
Contraindicaciones
La única contraindicación absoluta de la coronariografía
es la falta de consentimiento del paciente. No obstante,
existen una serie de situaciones en las que el riesgo del
procedimiento puede ser muy elevado y representar, por
tanto, una contraindicación relativa. El riesgo de la coro-
nariografía tiene que considerarse siempre en el contexto
de los beneficios que se obtienen. En la tabla 2 se recogen
algunas contraindicaciones relativas, por lo que deben
resolverse siempre que sea posible antes de practicarla.
Limitaciones
El cateterismo cardíaco sólo permite detectar la presencia
de obstrucciones coronarias, pero no visualizar la pared de
los vasos donde se acumulan las placas de ateroma. Estas
limitaciones han llevado al diseño de tecnologías para
complementar la coronariografía, entre ellas la ecografía
intravascular y la guía de presión.
Las técnicas de diagnóstico intracoronario (ecogra-
fía intravascular) consisten en la introducción en la arteria
coronaria de un catéter muy fino que permite analizar las
características de las placas de ateroma que se acumulan
en la pared arterial. La utilización de estas técnicas no es
excepcional y en muchas ocasiones es necesaria para mejo-
rar los resultados de la angioplastia coronaria o detectar
complicaciones.
Consultas más frecuentes
¿Es la coronariografía un procedimiento doloroso?
La coronariografía es un procedimiento mínimamente invasivo
que precisa de la punción de una arteria a la altura de la ingle o
la muñeca. Antes de dicha punción se utiliza anestesia local para
evitar el dolor. Una vez puncionada la arteria, el método es habi-
tualmente indoloro.
¿Existen riesgos?
Actualmente la coronariografía es una exploración de rutina, con
una incidencia de complicaciones muy baja. Por tanto, la mejor
actitud del paciente ante esta prueba es estar tranquilo y confiar
en el equipo que le atiende.
¿Qué síntomas llevan a solicitar esta prueba?
La coronariografía se indica habitualmente ante la sospecha de
obstrucciones en las arterias coronarias en pacientes con síntomas
como los siguientes: dolor u opresión en el pecho con los esfuer-
zos o en reposo, y fatiga o sensación de falta de aire. También se
puede indicar cuando los resultados de los estudios cardiológi-
cos no invasivos son anormales (electrocardiograma, ergometría,
ecocardiograma...). En cualquier caso, si el cardiólogo solicita una
coronariografía se debe a que necesita conocer con precisión el
estado de las arterias coronarias.
¿Qué información aporta la coronariografía?
La coronariografía muestra la anatomía del árbol coronario. Por
tanto, es una prueba imprescindible para conocer el estado real de
las arterias coronarias. Esta información es fundamental para esta-
blecer la presencia o ausencia de obstrucciones en estas arterias, así
como para tomar decisiones prácticas sobre cuál es el tratamiento
más conveniente en los pacientes con lesiones coronarias.
¿Qué tratamiento podría seguir a una coronariografía?
Según la extensión y gravedad de las lesiones encontradas en las
arterias coronarias, el cardiólogo puede sugerir al paciente tres
posibilidades: a) realización de una angioplastia coronaria, es
decir, dilatar las estenosis de las arterias coronarias mediante un
balón que se infla en la zona de la lesión; b) si las lesiones son múl-
tiples o en localizaciones difícilmente abordables para el catéter,
puede ser necesaria cirugía de baipás; c) en otros casos se descar-
tará la intervención instrumental y se preferirá el tratamiento con
medicamentos.
Además, el enfermo debe tener en cuenta que para evitar nuevas
obstrucciones en las arterias coronarias es fundamental cuidar los
hábitos de vida y reducir los factores de riesgo cardiovascular. En
todos los casos el paciente debe asumir un nuevo estilo de vida,
con una dieta equilibrada, ejercicio habitual, sin fumar y con un
buen control de las cifras de la tensión arterial y el colesterol.
TABLA 2. Contraindicaciones relativas para realizar
una coronariografía
Fiebre de origen no identificado
Infección activa no tratada
Anemia grave
Alteraciones electrolíticas o metabólicas significativas
Hipertensión sistémica no controlada
Antecedente de alergia al contraste (estos pacientes pueden
ser pretratados para evitar la reacción alérgica)
Sangrado activo
Insuficiencia renal progresiva
Anticoagulación con Sintrom®