104 glicéridos, el colesterol LDL (el kilos contribuye a reducir la presión arterial, los tri-Cuando existe sobrepeso u obesidad, perder unos
malo
), a elevar elcolesterol HDL (elbueno
) y a mejorar el metabo-El objetivo no es siempre alcanzar el peso regular de actividad física. nuya la ingesta total de calorías, con la prácticapeso y obesidad es combinar una dieta que dismi-La piedra angular para reducir y controlar el sobre-el tiempo.beneficios persistan la pérdida debe mantenerse enlismo de la glucosa. Ahora bien, para que estosideal
, yayo-yoinexorable, se conocen con el nombre de efectoen pocos meses, que suelen seguirlas de mododietas poco ortodoxas, y la recuperación del pesola báscula, a veces sustentadas en programas obruscas en pocas semanas. Las bajadas rápidas enpasos a lo largo de meses, que perseguir pérdidasmás de forma gradual, a base de dar pequeñosPor eso, es preferible deshacerse de esos kilos demenudo con gran esfuerzo personal. en el tiempo lo que se ha conseguido perder, arolemia o la diabetes. Lo importante es mantenermacos para el control de la tensión, la hipercoleste-importantes y reducir la necesidad de tomar fár-peso inicial) puede propiciar cambios metabólicoso ligera (por ejemplo, de un 5% o un 10% sobre eltible. Sin embargo, obtener una pérdida moderadaque, en muchas ocasiones, no es planteable ni fac-. Sobra decir que esto no sólo no es bueno,
rable de calorías. De ahí que reducir su ingesta,kilos sobrantes. El alcohol es una fuente conside-conviene revisar si se pretende decir adiós a losConsumir bebidas alcohólicas es otro hábito quemetabólico. múltiples efectos adversos a nivel hormonal ysino que es desfavorable para la salud por sustuirlas por sus versiones calorías de más. Lo más recomendable es susti-de zumos o cola también suelen aportar muchastribuir al control del peso. Las bebidas refrescantesademás de otros beneficios conocidos, puede con-light
.paciente.miento cercano delespecialista, con un segui-individualizada por el médico de familia o por elfármacos siempre deben ser prescritos de formareducción de los episodios cardiovasculares. Losexiste evidencia de que su uso se traduzca en unamente su posible contribución es modesta y nopeso (la sibutramina, el orlistat...), desgraciada-Respecto al uso de medicamentos para perdermayoría de los casos.cambio conductual que pueden ser aplicadas en laimposible y existen estrategias para facilitar elpacientes. Se trata de una tarea compleja, pero nopuede ser ignorada ni por los médicos ni por lospersonas durante décadas. Esta circunstancia notante costumbres y hábitos muy arraigados en lasde vida, lo que supone modificar de forma impor-la obesidad implica introducir cambios en los estilosComo se puede deducir, la base del tratamiento depeso corporal. Se trata de un fenómeno temporal. cipio, puede suponer un efecto paradójico sobre elporque el músculo pesa más que la grasa y, al prin-mueva cuando empiezan a ejercitarse. Esto sucedesonas se sorprenden de que la báscula no seque la pérdida de peso sea visible. Muchas per-beneficiosos sobre el organismo incluso antes depeso es el ejercicio físico. Su práctica tiene efectosEl otro pilar de cualquier programa de control delenfermedades cardiovasculares.se asocia con una menor incidencia de todas lasoliva, y productos lácteos desnatados. Su consumoterránea, que incluye frutas y verduras, aceite derespecto a sus beneficios es la llamada dieta medi-dietéticos con mayor grado de evidencia científicaepisodios coronarios mortales. Uno de los patronesácidos grasos omega-3 puede reducir el riesgo dePor el contrario, introducir en la alimentación losinsuficiencia cardiaca. sión, de ictus y también de enfermedad coronaria epresión sanguínea y con ello el riesgo de hiperten-forma de cloruro sódico (sal común), aumenta laexceso de sodio en la dieta, especialmente enbabilidad de enfermedad cardiaca; mientras que elelevan el colesterol en la sangre incrementan la pro-grasas saturadas y el consumo de productos queAsí, no hay que perder de vista que la ingesta dea las personas en peligro de desarrollarla.los pacientes con alguna dolencia cardiovascular yyarnos fuertemente en este aspecto, sobre todo amédico de familia y los especialistas deberían apo-menor riesgo y los profesionales de enfermería, elconocer los hábitos alimentarios asociados a untener la salud cardiovascular. Todos deberíamosLa alimentación es un pilar fundamental para man-visible.tidos. Antes de cocinar las carnes, retirar la grasaconejo, en detrimento de carnes rojas y embu-• Tomar más pescado y carnes de pollo, pavo ybollería industrial, precocinados y aperitivos.ácidos grasos “trans”, presentes en la pastelería ylos lácteos desnatados y limitar el consumo dedentes del pescado. Conviene también optar poresenciales, particularmente los omega 3, proce-nadas y estimular la ingesta de ácidos grasosminar o reducir al mínimo las grasas hidroge-del 7% de la ingesta calórica total), tratar de eli-posible de ácidos grasos saturados (por debajode oliva), mantener un consumo lo más bajograsos monoinsaturados (procedentes del aceiteque exista un claro predominio de los ácidosque se consuma también cuenta. Se recomienda35% del total de calorías diario. El tipo de grasa• Limitar el consumo de grasas a un máximo del(quitar el salero de la mesa).condimentar los alimentos y evitando añadirlaalimentos procesados, moderando su uso parasumo de alimentos frescos en detrimento de los• Reducir la ingesta de sal, fomentando el con-semana.Tomar legumbres y pescado varias veces a lafrutas y verduras, así como cereales integrales.• Consumir diariamente cinco o más raciones deadecuada para mantener el peso “ideal”.• Seguir una dieta variada y una ingesta calóricarecomendaciones:carácter general se pueden ofrecer las siguientesfactores de riesgo que presente cada persona, conindividualmente, teniendo en cuenta los distintosAunque el consejo dietético se debe establecerLA HIPERTENSIÓN ARTERIALLA HIPERCOLESTEROLEMIALA DIABETESTABAQUISMOOTROS FACTORES DE RIESGOCAMBIAR EL ESTILO DE VIDA