Hay que mencionar igualmente la construcción de barcos co
mo una rama especial y característica del arte de la construcción
de Mesopotamia. Los barcos más antiguos fueron fabricados
con cañas, que se impermeabilizaban recubriéndolas con asfal
to. Muy pronto, en la época sumeria, se comenzaron a cons
truir barcos de madera. Había navios de distintas formas y ca
pacidades: esbeltas canoas y pesados barcos de guerra; barcos
de remo y barcos de vela con uno o más mástiles. Existían cien
tos de nombres sumerios y acadios para los diversos tipos de
barcos, compilados gracias al agotador esfuerzo del sabio
finlandés Armas Salonen. No carece de interés el que se hayan
conservado hasta ahora dos de estos tipos de barcos: el guffa
(que es propiamente un cesto recubierto con pieles y asfalto
—véase fig. 34) y el kelek (una almadía que se mantiene sobre
eí agua gracias a pieles de cordero hinchadas y a la que los babi
lonios llamaban kalakku— véase fig. 35).
Fig, 35. Fragmento de otro relieve, procédente de otro lugar, que representa
un kelek
LA CANTERIA
En la llanura de Mesopotamia sólo se encontraban piedras
muy excepcionalmente (diminutos guijarros arrastrados por los
ríos desde las montañas). Como sustituto de la piedra se
empleó principalmente asfalto. Sin embargo, Babilonia tam
bién tuvo su período neolítico , que precedió a la era de los me
tales. Las más antiguas herramientas, tales como hachas, mar
tillos, sierras, puntas de flechas y cuchillos, se hicieron de pe
dernal y obsidiana (véase cap. IV). Entre los Utensilios domésti
cos se encontraban sobre todo muelas y moletas de basalto y
morteros de calcita. Por supuesto todas estas piedras eran im
portadas. La piedra no se utilizaba sólo con estos fines sino