Cuenta Pública Guido Girardi

(Guido Girardi) #1

ISAPRES: denunciamos sus abusos y pedimos cambios


Al amparo de la Constitución de Pinochet, en 1981 el financiamiento del Sistema de Salud chileno fue dividido en un seguro
público, administrado por el Fondo Nacional de Salud (Fonasa), y privado, a cargo de las Instituciones de Salud Previsional (Isa-
pres). Pero el principal objetivo de estas aseguradoras no ha sido la salud de sus afiliados, sino multiplicar las utilidades de sus
dueños, incluso usando prácticas criminales como negar atención a las preexistencias, elevando los costos de los planes a
mujeres en edad fértil, ancianos y niños, entre otras prácticas poco éticas.


Hemos presentado múltiples denuncias contra los abusos de estas instituciones, que no respetan los derechos humanos y
violan el juramento hipocrático de cuidar a los enfermos. También hemos impulsado proyectos de ley para regularlas y
modificar su rol, así como propuestas para que se transformen en un seguro complementario dentro de un Sistema Único de
Salud.


Genotóxicos: nuestra denuncia en favor de temporeras


Desde los años 90 hemos luchado para impedir que se utilicen pesticidas tóxicos en el trabajo agrícola.
Como consecuencia del uso de plaguicidas Chile llegó a tener a mayor prevalencia latinoamericana de malformaciones
congénitas como el síndrome de Down. Junto al doctor Ricardo Uauy (Premio Nacional de Ciencias) logramos que a la harina
se le agregue ácido fólico, porque es un protector de las malformaciones congénitas.


En 2004 pedimos medidas de protección fitosanitarias contra el uso de plaguicidas cancerígenos. En 2009 nos hicimos parte
de las denuncias de trabajadores del sector que sufrieron intoxicaciones y quemaduras. En julio pasado (2021) denunciamos
que el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) había otorgado permiso para uso en Chile de genotóxicos que son plaguicidas prohi-
bidos por muchos países.


Píldora del día después: la lucha por los derechos


sexuales y reproductivos


Nos hicimos parte de todas las acciones legales necesarias para impedir que se prohibiera la píldora del día después
porque los sectores conservadores la califican de abortiva. Defendimos el derecho de las mujeres para que pudieran disponer
de este anticonceptivo de emergencia y, como presidente de la Comisión de Salud del Senado, propusimos que se permitiera
y facilitara el acceso a menores de 14 años, pues lo consideramos una alternativa para impedir el embarazo no deseado y el
aborto.


Causas Salud


La Segunda, 14 de agosto, 2014

Junto a organizaciones feministas exigiendo la legalización de la píldora del día después

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