Luhho – Junio-Julio 2017

(Marcin) #1
BELLEZA & ESTILO
Legado

de la época, objetos de arte finamente
elaborados, fotografías y anuncios.
Además, incluirá los zapatos creados
en la década de 1920 en una exclusiva
colección, demostrando la estrecha
afinidad de Salvatore Ferragamo con sus
contemporáneos en el mundo del arte.
La primera sala inicia la exposición
con una sección dedicada al regreso de
Salvatore Ferragamo a Italia a bordo
del Roma. Introduciendo la temática del
transatlántico, la sala cuenta con un
montaje de fotografías que representan
las exquisitas habitaciones y la vida
lujosa a bordo del barco. En el centro,
una videoinstalación documenta la vida
de Salvatore y sus experiencias con la
industria cinematográfica en los Estados
Unidos como los estilos y zapatos que
diseñó a las estrellas del cine de la época.
La segunda sala ya muestra a Florencia


en el siglo XX y puede apreciársela
a través de las obras maestras de los
pintores del momento. Se observa un
mundo en el que la discusión sobre el
arte, la literatura, la música e, incluso, el
cine estaban a la vanguardia. También,
se aprecia un cortometraje que realizó
Ferragamo al llegar al país.
En la tercera sala, el Museo Salvatore
Ferragamo expone el folclore italiano y
las artes decorativas contemporáneas,
cuyo repertorio alimentó la creatividad
de Salvatore. Los acontecimientos
mostrados son los que ayudaron a dar
la forma al gusto del país y crearon el
concepto por excelencia de la producción
‘Hecho en Italia’, arraigada en su
regionalismo e identidad. Por otro lado,
en la sala 4, el contraste llega con la
presencia de las mujeres italianas. En
el reflejo de un periodo posterior a la

II Guerra Mundial, se aprecia como las
mujeres se libraron de las limitaciones
que el fascismo les dictaba e hicieron
su aparición en la sociedad. Círculos
literarios, festivales y acontecimientos
deportivos dieron lugar a su nueva
presencia, una que Ferragamo
aprovechó para abastecer con creaciones
extraordinarias y se observan en retratos
y pinturas de destacadas féminas.
La quinta sala del museo muestra la
Florencia industrial de los años veinte
por medio de obras que demuestran
la habilidad artesanal y la expresión
artística de la región. A continuación,
la sexta sala refleja la casa italiana, el
lugar que concibe todas las artes y la
cuna de la tradición de la calidad de
los productos hechos en el país. Así, la
exposición de la travesía de Salvatore
Ferragamo finaliza con una muestra
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