EL MUNDO. LUNES 21 DE OCTUBRE DE 2019
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ESPAÑA
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JORDI RIBALAYGUE BARCELONA
El Ayuntamiento de Barcelona ha
confiado la atención a los manifes-
tantes y vecinos afectados por las
acciones violentas tras conocerse
las condenas a líderes del procés a
un grupo crítico con el operativo
en el que la Policía Nacional y los
Mossos d’Esquadra colaboran pa-
ra sofocar los altercados.
El Gobierno municipal de comu-
nes y socialistas que encabeza la al-
caldesa Ada Colau ha concedido
esta semana 9.700 euros al Centro
Irídia para que preste asistencia
psicosocial y asesoría jurídica a «to-
das las personas heridas o afecta-
das por las cargas policiales o por
estrés, ansiedad o angustia vincula-
das a las situaciones de tensión en
el marco del ejercicio del derecho a
la protesta», informa el Consistorio.Se trata del mismo colectivo que
ayer condenó por «desproporcio-
nadas» las intervenciones de los
cuerpos de seguridad en Barcelo-
na, y que reclamó la dimisión del
conseller de Interior, Miquel Buch.
A través de redes sociales, Irídia se
ofrece gratuitamente a los manifes-
tantes detenidos y heridos en los
disturbios para denunciar «la vio-
lencia policial» que reprocha tanto
a la Policía Nacional como a los
Mossos. Irídia ejerce de acusación
a la vez que el Ayuntamiento en las
causas abiertas en los juzgados
contra algunos agentes de la Poli-cía Nacional por las cargas duran-
te el 1-O en la capital catalana.
Junto a la asociación Stop Balas
de Goma, Irídia instó al ministro de
Interior en funciones, Fernando
Grande-Marlaska, a que «la Policía
deje de usar desde ahora mismo las
balas de goma en Cataluña», ape-
lando a que «al menos cinco perso-
nas han sufrido lesiones graves»
por esos proyectiles esta semana. El
Parlament prohíbe desde 2014 usar-
los a los Mossos d’Esquadra, que
los han sustituido por unos prototi-
pos hechos de una espuma denomi-
nada foam. Irídia –que habla de una
«ola represiva» lanzada por los
cuerpos policiales– también pide
que la policía autonómica no dispa-
re balas de foam a la cabeza.
El Consistorio explica que los
9.700 euros se concretan en la ce-
sión de un espacio en unas oficinas
municipales y en «apoyo a los equi-
pos de atención psicosocial y de
asesoramiento jurídico» de la enti-
dad, y recalca que el auxilio que fa-
cilita a través de Irídia hasta el 31 de
octubre no se circunscribe sólo a los
lesionados por la actuación de las
fuerzas de seguridad.
En todo caso, Irídia no se ha refe-
rido en los últimos días a los daños
materiales provocados por la acción
de los radicales, como los coches si-
niestrados o el mobiliario urbano
quemado («un ojo o una vida valen
más que un contenedor», dice co-
municado), y ha focalizado su aten-
ción en los presuntos excesos poli-
ciales. «Los agentes están actuando
de manera totalmente descontrola-
da y movidos por la intencionalidad
de castigar y humillar», acusa en re-
des sociales, y urge a Interior a que
expediente y retire de funciones a
algunos agentes. Sobre un vídeo en
el que se ve a varios mossos rodean-
do a un joven en el suelo y golpeán-
dolo con la porra, afirma que «son
agresiones que tan sólo buscan
asustar y que atentan contra la inte-
gridad moral de las personas».
Por otro lado, Colau ha asegura-
do que el Ayuntamiento reclamará
daños y perjuicios por la vía civil de-
bido a los estragos, que cuantifica
en más de dos millones de euros.
Ciudadanos y el Gremio de Restau-
ración de Barcelona le habían exigi-
do que fuera más allá y que el Con-
sistorio se personara como acusa-
ción particular contra los detenidos.Asesoramiento
gratuito a los
detenidos con
dinero de Colau
La edil subvenciona al Centro Irídia, que
acusa a los policías de una «ola represiva»
Y al séptimo día, paso cortado
Los manifestantes no pudieron llegar hasta la Delegación en Barcelona
ANA MARÍA ORTIZ BARCELONA
La protesta convocada ayer fren-
te a la Delegación del Gobierno
en Barcelona no pudo conseguir
su objetivo. Al menos una hora
antes, todas las calles que dan
acceso al edificio gubernamental
fueron cortadas por los Mossos
d’Esquadra y la Policía Nacional,
quienes también impidieron el
paso de la prensa. Fue la primera
vez, en los siete días de protesta
desde que se conoció la senten-
cia del procés, que se impide a
los manifestantes acceder al lu-
gar de una convocatoria.
La cita era a las 18.00 horas y,
ante el imprevisto, media hora an-
tes los manifestantes ya tenían a
través de las redes sociales nue-
vas instrucciones. El foco de laprotesta se trasladaba al cruce de
la calle Mallorca con la de Bruc,
justo frente a una de las barreras
establecidas por la Policía. Llama-
dos por el colectivo Pícnic per la
República y los CDR, la consigna
era acudir con bolsas de basura
a la Delegación del Gobierno y
así lo hicieron varias de las 2.
personas que, según la Guardia
Urbana, se congregaron en el ci-
tado cruce. Allí se lanzaron cien-
tos de bolsas de basura entre la
valla protectora y las dos furgone-
tas de los Mossos d’Esquadra que
se encontraban tras ellas.
Posteriormente, los manifestan-
tes se movilizaron y descendieron
por el paseo de Gràcia hasta lle-
gar a la plaza Urquinaona, esce-
nario el pasado viernes de gravesenfrentamientos entre manifes-
tantes violentos y agentes. Desde
ese punto, bajaron por la Via
Laietana hasta llegar, sobre las
21.15 horas, a la altura de la Jefa-
tura de Policía de Barcelona, don-
de corearon varias consignas sin
que se registraran incidentes al
cierre de esta edición. Algunos
agentes de la unidad antidistur-
bios salieron de las furgonetas pa-
ra formar junto al edificio.
También se produjo una impor-
tante concentración de personas
en la avenida Meridiana, donde
los asistentes a otro llamamiento
a través de las redes sociales cor-
taron el tráfico, sobre las 19.
horas, en esa gran arteria barce-
lonesa a la altura de la estación de
tren y metro de Fabra i Puig.Una imagen de la concentración independentista de ayer en Barcelona. JAVI MARTÍNEZ
Condena. La cuatro
asociaciones judiciales
discrepan sobre el fallo del
Supremo –«Las sentencias
pueden ser criticadas», dijo
ayer la Asociación Profesional
de la Magistratura– pero
coinciden en que «son de
obligado cumplimiento».Violencia. Todas la censuran
y se solidarizan con las Fuerzas
de Seguridad: «La libertad, el
respeto al Estado de derecho
y la defensa de los derechos
humanos son pilares básicos
que deben ser preservados».APOYO JUDICIAL
DESAFÍO SOBERANISTA LA POLÉMICA