Jueves 3 octubre 2019Expansión 51DIRECTIVOS
Marta Fernández. Sevilla
¿Sigue vigente la creatividad de la
gastronomía española? ¿Los chefs
tienen margen para seguir cons-
truyendo propuestas culinarias?
¿Es rentable? Fue uno de los deba-
tes que Andalucía 360 planteó ayer.
Se trata de un congreso, que, apo-
yado en el know how de Mikel Ze-
berio (una especie de Leonardo de
la gastronomía, ya que compagina
roles como hostelero, parrillero,
profesor, asesor, escritor y, sobre
todo, experto en producto), se ce-
lebra hasta hoy en Sevilla.
Andalucía 360 reunió a varios
chefs españoles que debatieron
sobre creatividad culinaria. “En
España, tuvimos la suerte de te-
ner a Ferran Adrià y después a
personas como Andoni Luis
Aduriz [que hoy dialogará con
el brasileño Alex Atala en este
foro], uno de los chefs más crea-
tivos del mundo de la cocina,
que nos dieron unos argumen-
tos y unas vías de liberación que
nos daban unas posibilidades
enormes y, aunque no había In-
ternet, sentías que tenías cóm-
plices o células en otras partes
de España con las que te sentías
apoyado”, argumenta el astu-
riano Nacho Manzano, con dos
estrellas Michelin en su matriz
Casa Marcial. “Mal iríamos si
no vemos o apoyásemos la crea-
tividad en la cocina, a la que to-
dos en mayor o menor medida he-
mos aportado algo”.
Para el riojano Francis Paniego,
con dos estrellas en El Portal de
Echaurren, “en la decisión sobre el
tipo de negocio que se va abrir, es
muy peligroso marcar líneas como
que la creatividad ahora mismo es
algo perjudicial. Me da miedo que
se establezcan esas ideas. Me inte-
resa más un cocinero con actitud
de buscar y arriesgar, aunque se
equivoque una y mil veces, que un
cocinero que copia y busca el éxito
más rápido”.Si unos hablan de capacidad
creativa y riesgos, otros lo asimilan
a una actitud.“Por encima de la
creatividad, está la actitud creativa,
que, como cocineros, podemos
aplicar a las ventas o compras”,
sostiene el cántabro Jesús Sán-
chez, de Cenador de Amós, con
dos estrellas, igual que Molino de
Urdaniz, donde el navarro David
Yarnoz cree que “la creatividad se
puede cultivar y, a veces, se con-
funde con vanguardia”. Según el
gallego Pepe Solla, con una estrellaen Casa Solla, “combinar unos ele-
mentos en un plato no es crear. No
creo que todos los cocineros sea-
mos creativos, pero eso no nos res-
ta valor”.
En medio de estos chefs con es-
trella, se posicionó el hostelero-fi-
lósofo Sacha Hormaechea, para
quien “a veces, el concepto creati-
vo de algunas personas va muy por
delante de los demás; alguien pue-
de crear un plato hoy y no ser com-
prendido, pero, dentro de cinco
años, puede ser lo que le guste a to-
do el mundo.El examen creativo
de la gastronomía
PISTA CULINARIA
Shakespeare y Amaia, de
tú a tú en la Costa Brava
TEMPORADA ALTA El festival va de los clásicos a la creación contemporánea.
Nerea Serrano. Madrid
Si Shakesperare (de Inglaterra) y
Amaia (de España) coincidieran hoy
en tiempo y espacio, la conversación
podría ser de lo más teatral. Ese agu-
jero negro en el que el escritor uni-
versal y la cantante ganadora de Ope-
ración Triunfo coexisten se llama
Temporada Alta, un festival de artes
escénicas que viajará de los clásicos a
la creación contemporánea del 6 de
octubre al 9 de diciembre en Girona,
Salt y otras localidades de la provin-
cia. En su 28 edición, acogerá 19
montajes internacionales, 25 pro-
ducciones y coproducciones del fes-
tival, y más de 30 propuestas de crea-
ción contemporánea que invitan a la
reflexión y a repensar de dónde ve-
nimos, dónde estamos y cuáles son
los retos futuros que nos debemos
plantear como sociedad.
En esta aproximación del teatro, la
danza, el cine o la música a los espec-
tadores, el festival ha elegido obras
que reviven textos universales de
Shakespeare, Pinter, Lorca, Zweig,
Walser, o de Bertrana, Rodoreda y
Verdaguer. Temporada Alta tam-
bién ha programado obras que tra-
tan sobre la condición humana par-
tiendo de textos clásicos, a menudo
desde una lectura más contemporá-
nea, como son, por ejemplo, O agora
que demora, que habla sobre la inmi-
gración a partir del texto de la Odisea
de Homero o Iphigenia en Vallecas,
sobre la juventud sin futuro.
Del Measure for measure de la Ro-
yal Shakespeare Company –dirigido
por el director de la misma, Gregory
Doran, el 11 de octubre en el Teatro
Municipal de Girona– a la música.
ARTE
Chefs reunidos ayer en ‘Andalucía 360’, con nombres como David Yarnoz, Jesús
Sánchez, Nacho Manzano, Andoni Luis Aduriz, Álex Atala y Francis Paniego;
ayer con Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía.Alex Iturralde
Andoni Luis Aduriz, chef de Mugaritz.Sobre estas líneas,
un momento de la
adaptación de
‘Giselle’, de la bailari-
na y coreógrafa Dada
Masilo, que se estre-
nará en Temporada
Alta. A la izquierda, la
cantante Amaia que
presentará su disco
en solitario ‘Pero no
pasa nada’.La citada Amaia llega a Girona para
presentar su primer disco en solita-
rio Pero no pasa nada y la mítica Jane
Birkin vuelve a subirse al escenario
con Symphonie Intimer.
En el apartado de la danza, dos
de sus grandes coreógrafas estrena-
rán sus piezas. Por un lado, Marta
Carrasco hablará de género y transe-
xualidad, y por otra parte, llegará
al festival el estreno del nuevo mon-
taje de Sol Picó, que junto con Susa-
na Barranco presentarán Red Room,un espectáculo sobre la prostitución
que combina la danza, el teatro y el
cine.
Además, el festival acogerá el es-
treno en España de la adaptación de
Giselle de la bailarina y coreógrafa
Dada Masilo, que acompañada de la
música de Philip Miller, combina
elementos de clásica y percusión
africana. Quizá esta Giselle feminista
y contemporánea fuera un buen te-
ma de conversación para Shakes-
peare y Amaia.CULTURA
PINTURA ‘Tocar el color: la
renovación del pastel’, es el
nombre de la exposición
inaugurada ayer en la Fundación
Mapfre, en Barcelona, y que podrá
verse hasta el 5 de enero. La
muestra profundiza en el
resurgimiento de esta técnica
desde 1830, cuando aparece el
término ‘pastelista’, hasta sus
evoluciones en el siglo XX, y
analiza su lugar frente a la pintura
al óleo. En la imagen, ‘Nubes
blancas, cielo azul’ (1859), de
Eugène Boudin.