LOS BAILES POPULARES DE 1947- 1955
Los primeros bailes que se efectuaban en el parque Israel C. Téllez, en la vuelta
chiquita, tocaban músicos de aquí como la orquesta Papantla del Sr. Francisco
Valencia “el pajarito” y de Don Efraín Martínez. Los varones portaban un moño
azul en la camisa, pagaban un peso o uno cincuenta, las damas no pagaban, llegó
a costar posteriormente desde los cinco, diez y hasta veinte pesos.
Actualmente se llega a pagar hasta 100 pesos como corresponde a la época
de acuerdo con la economía. Los bailes eran muy alegres, las madres tenían
como costumbre acompañar a sus hijas. Se dejaron de hacer en “la vuelta
chiquita” para continuarlos en el “salón recreativo”, donde actualmente se ubica el
Almacén General de Muebles sobre la calle Azueta.
La tertulia comenzaba a las seis de la tarde y terminaba a las 10 de la noche,
cuando alguien deseaba bailar con alguna señorita, no se dirigía a ella, sino a su
madre. Los caballeros se acercaban y decían: “señora me permite bailar con su
hija” y ella contestaba “si” o “no”; y si decía que “sí”, bailaba con la persona
quisiera la joven o no.
Si se atrevían las jóvenes a cuestionar las decisiones de su madre,
respondían: “yo te traje a bailar, si no quieres, vámonos”. Cuando llegaba alguien
del agrado entonces bailaba con él, sólo se acostumbraba bailar una tanda de tres
piezas, por lo que se aclaraba que no debían de “abonarse” (palabra común en
esa época). En el caso de los enamorados o novios oficiales podían bailar de
“cachetito”.
Las madres determinaban la hora de retirarse con las jóvenes a casa, sin
importar que se encontraran cómodas en el baile. La autoridad materna era
incuestionable y en caso de no ser así se castigaba severamente el desacato.
Con el paso del tiempo fue mejorando la calidad de la música. Empezaron a
invitar orquestas de la ciudad de México famosas como la de Luis Alcaraz, Pablo
Beltrán Ruiz, Dámaso Pérez Prado, Mickey Laure, Carlos Campos, La Sonora