fondo se veían dos puertas, y en la pared principal por la que entraron
estaba adherida una pantalla táctil muy antigua, de tecnología obsoleta para
la época. En el centro de la pantalla se contemplaba el escudo de Eumaria,
el cual era de color verde y dorado; conteniendo las palabras VERDAD y
PAZ.
—Hmmm... —Boldort suspiró mirando la habitación con nostalgia.
Él hablaba para sí mismo en voz alta—. ¡Qué recuerdos! Es como en los
viejos tiempos. Bueno, creo que la historia se volverá a repetir. Aunque,
siendo sincero... nunca creí que llegaría este momento. Jamás pensé que un
día, sus hijos, amigos míos... entrarían a esta habitación.
Esmeralda miraba a Boldort sin sorprenderse por sus palabras.
Samuel en cambio se notaba cada vez más confundido.
—Por favor recuéstenlo en cualquiera de las camas. Aquellas
puertas que ven en el fondo son los baños. Un sanitario es para la señorita y
el otro es para el joven caballero —señaló Boldort.
De repente escucharon un sonido que provenía del pasillo. Por la
entrada principal ingresó velozmente un pequeño robot con ruedas en forma
de platillo. Este comenzó a aspirar el lugar, dirigiéndose directamente hacia
los sanitarios. La pequeña máquina tenía dos brazos metálicos muy
delgados con los que sostenía un trapeador.
—¡Ah! Es Lara, mi pequeña robot de limpieza. Ella se encarga de
mantener aseado todo el lugar. —Boldort sonreía orgulloso—. En verdad
hace que mi vida sea mucho más fácil y cómoda.
—¡Guaaau! —exclamó Samuel, bastante emocionado.
Una vez que Lara terminó de inspeccionar ambos baños, esta salió
con rapidez de la habitación y se dirigió a los pasillos.
—Hmmm... Supongo que revisó que los sanitarios estén limpios y
listos para usarse. Como pueden ver... las camas están ordenadas y todo está
perfectamente aseado. Si soy sincero, hace tiempo que no ingresaba a este
lugar. Ahora les daré su espacio. No hagan nada malo.
Cuando terminó de decir eso, Boldort le guiñó el ojo a Sam. El
chico solo se sonrojó y evitó mirar a Esmeralda. El Raxán cerró la puerta
avisando que estaría en la sala de operaciones haciendo algunas llamadas
importantes. Ella ordenó recostar a Morgan en la cama. Luego de hacer eso,