Posteriormente procedió a relatar todo; el búnker, los primeros años
de la nación, las enfermedades por los rayos ultravioletas del sol, las
ronchas que estos produjeron en los normales, y la discriminación hacia los
pigmentados. Detalló el rechazo que tuvo esa minoría por su resistencia
genética a ese ambiente hostil. También habló de la guerra de la hambruna y
del exilio a los colosos de Astoriu.
Casi la totalidad de los habitantes se encontraba perpleja al oír
atentamente el triste relato del magnate, quien continuó explicando
—Queridos ciudadanos, sé que es muy difícil de digerir lo que están
oyendo, pero si no me creen a mí, entonces creerán a la gobernante Celia...
››Ella les dirá la verdad acerca de la “cárcel de detención temporal
de alta seguridad” que está ubicada en esta isla. Dejaré que la Pilar
encargada de Paronia sea la que se encargue de revelarles todo.
La gobernante miró en dirección al suelo con ojos avergonzados, ni
siquiera se dignó a fijar la vista a la cámara. Entonces finalmente suspiró
pronunciando sus primeras palabras.
—Está bien. Los habitantes de esta isla ya saben lo que hay dentro
de esa cárcel, aunque, esto es algo que todas las demás regiones también
necesitan saber.