- Trajeron de una ysla de los Lucayos que se llama
Ciguateo seis yndios, los dos hombres e los tres
muchachos e una mujer con una criatura. - El qual dicho Juan Perez de Ortobia, capitán del
dicho caravelón juro solemnemente no hacer otra
cosa de la dicha isla de Bimini ni de las otras yslas
que anduvo a descubrir de rescate ni otra cosa de que
pertenece a Su Alteza cosa alguna.
A.G.I. Contaduria – 1071
Bibliografía
Murga Sanz, M. V. (1971). Juan Ponce de León: Fundador y Primer
Gobernador del Pueblo Puertorriqueño, Descubridor de la Florida y
del Estrecho de Bahamas. Río Piedras, P.R.:
Editorial Universitaria, Universidad de P.R. Pp. 114, 299.
Viaje del Almirante Diego Colón a San Germán (1514-1515)
Luego de terminar la batalla del Yagüeca en marzo de 1511,
se envió a Juan González con su gente al Daguao por año y medio, para
pacificar a los indios en esa zona. Cerca del 1514, le fue ordenado por
el Gobernador de la isla que enviara a su gente a Caparra, capitaneados
por Martín de Izazaga y él (Juan González), tomó un bergantín para ir
hasta San Germán, en donde se encontraba en visita oficial el
Gobernador de las Indias, don Diego Colón, el 2 de junio de 1514.
Por haberlo cogido una calma muy grande, saltó a tierra Juan
González con tres compañeros más, en un puerto a quince leguas de la
Villa de San Germán que le llamaban el Puerto de Peñas, que
suponemos fuera entre Tallaboa y Guayanilla. Estando como a dos
horas de viaje de San Germán, divisaron humo en una sierra y para allí
se dirigieron con mucho sigilo, cayendo sobre “cuatro indios muy
valientes”, que llevaban cuatro cargas de arcos y flechas envenenados,
con destino a la Villa de San Germán. Juan González los atormentó
hasta arrancarles la confesión de que eran indios del cacique Humay y
le llevaban esas armas para atacar el poblado de San Germán, al que
tenían cercado y atacarían de un momento a otro.
Juan González llegó a San Germán y cuando le estaba dando
la alarma al Almirante y su gente que estaban durmiendo
completamente desprevenidos, iniciaron el ataque los indios.
Comenzaron pegando fuego a las casas de madera y paja y mataron
muchos españoles, como 40 en el primer asalto. Juan González, viendo
que se acercaban canoas con guerreros desde donde disparaban sus
flechas envenenadas con curare, se tiró al mar y allí mató a puñaladas
al Cacique Guarionex, el que había asesinado a Sotomayor y a cinco
indios más, saliendo muy mal herido con una lanzada en un muslo.