propios errores de juicio. Este problema es mayor en aquellos
planetas que todavía no han terminado su proceso de evolución.
Para encontrar cuáles son esas leyes constantes y verdaderas es
necesario que el filósofo investigue cuáles de todas las cosas
permanecen a lo largo del tiempo sin cambiar. Hay cosas
duraderas que son correctas solo durante un tiempo y también
hay cosas duraderas que están equivocadas, sin embargo, la
verdad es lo más constante de todo, porque no hay nada en el
universo que la puede contradecir de forma indefinida. Se puede
negar la verdad durante un tiempo, pero no es posible engañar a
todos todo el tiempo. Cuando un filósofo consigue detectar esas
verdades universales que son constantes adquiere un punto de
referencia excelente para comprender el mundo, a partir de ese
momento puede diferenciar aquello que es temporal y sujeto al
error y aquello que es indefinido y correcto. Lamentablemente,
muchas ideas geniales descubiertas por los filósofos antiguos
fueron mezcladas con las más burdas supersticiones, a veces
esas supersticiones las tenían los mismos filósofos y otras veces
fueron añadidas con posterioridad, el resultado final es una
suma de creencias con una parte de verdad y otra equivocada.
Por eso, es importante que un filósofo trate de ser imparcial y
rechace los prejuicios, pero no me refiero a aquello que en los
colegios o en el cine llaman prejuicios, que suele estar
demasiado influido por opiniones políticas y no por pruebas, sino
que debe negarse a llamar prejuicio a una actitud solo porque
otros nos dicen que lo es, porque en realidad un prejuicio, se
basa en considerar buena una conclusión sin molestarse en
comprobar el sentido o la lógica que pueda tener. Sin embargo,
mucho de lo que se enseña a los niños está lleno de prejuicios y
se usa para dirigirlos a favor de la ideología política que domina
en ese momento. Es decir que ese niño, cuando llegue a adulto,
antonio.p
(Antonio.P)
#1