El Mundo - 21.10.2019

(Steven Felgate) #1

EL MUNDO. LUNES 21 DE OCTUBRE DE 2019
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MMADRID
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J O N E S B Ø C O M O G R A N R E F E R E N T E


Getafe Negro se


vuelca con el


‘noir’ noruego


La novela negra de la Europa nórdica copa


esta duodécima edición del festival literario


C U L T U R A


JAVIER MEMBA MADRID
La duodécima edición de Getafe Ne-
gro se prolongará desde hoy, 21 de
octubre, hasta el próximo día 27 y
contará con Noruega como país invi-
tado. Una semana dedicada a la lite-
ratura noir que cumple ya con la tra-
dición implantada desde el año 2007
en la localidad del sur de Madrid.
Siendo Jo Nesbø el heraldo del
noir noruego y uno de los repre-
sentantes más destacados de todo
el noir de los países escandinavos,
el creador del inspector Harry Ho-
le –un sociópata cuyos casos se
han traducido a 51 idiomas, ven-
diendo más de 28 millones de
ejemplares en todo el mundo– será
uno de los autores más sobresa-
lientes de los más de 60 que parti-
ciparán en el festival.
Al igual que Nesbø, que ya ha-
bía acudido a esta cita madrileña
con la novela criminal, Antonio
Muñoz Molina también se había
encontrado con sus lectores en an-
teriores ediciones del festival y re-
petirá en esta nueva ocasión. No
hay que olvidar que el interés por

el género de este Premio Príncipe
de Asturias se remonta, como po-
co, a El invierno en Lisboa (1987).
Tus pasos en la escalera, su última
novela con apenas unos meses de
vida, entra de lleno en el relato cri-
minal. Es por eso que el propio
Muñoz Molina y la madrileña
Marta Sanz destacan entre los au-
tores españoles que participarán
en este nuevo Getafe Negro.
«Noruega es un país de una pu-
jante literatura en todos los ámbi-
tos desde siempre», comenta Lo-
renzo Silva, un año más comisario

de los encuentros y uno de los
grandes especialistas españoles del
género. «Pese a ser un país relati-
vamente pequeño y tener un idio-
ma que no habla mucha gente
siempre ha tenido una literatura
muy potente. Los países nórdicos
son países de contadores de histo-
rias desde las famosas sagas. Den-
tro de esto, Noruega es un país que
ha destacado muy significativa-
mente en la novela negra por auto-
res como Jo Nesbø».
Pero no es el único, Ruth Lille-
graven, la otra autora noruega que
también vendrá a Getafe y autora
entre otros títulos de En el fiordo
profundo, ha recorrido un camino
que le ha llevado de la poesía y la
literatura infantil al relato criminal.
«Con ambos podremos hacer una
buena aproximación a las razones
por las que la novela negra norue-
ga ha tenido esa gran repercu-
sión», señala Silva.
Más allá de la propuesta norue-
ga, este duodécimo Getafe Negro
perfilará un poco más la visión de
conjunto del nordic noir con la pre-
sencia del islandés Ragnar Jó-
nasson. «Es el autor emergente en
ese país y buen conocedor de la
novela negra escandinava», expli-
ca Silva de quien con 17 años ya
traducía las novelas de Agatha
Christie a su idioma. «Será una voz
interesante para acercarnos a una
reflexión sobre el porqué de la
trascendencia de la novela negra
en la literatura nórdica en general
y noruega en especial, así como su
significación en el momento actual.
A fin de cuentas, ya son varias las
décadas de su pujanza y presencia
en el mundo y, en todo ese tiempo,
se ha producido una evolución».
De otras latitudes acudirán a
Madrid –ya hace muchos años que
puede hablarse de esta cita en Ge-
tafe como del festival de novela ne-
gra de la capital, en la que se desa-
rrollan un buen número de sus ac-
tividades literarias de todo tipo–
autores como el italiano Sandrone
Dazieri, todo un maestro de lo que
la crítica y lectores han dado en lla-
mar el spaghetti crime, y el francés
Philippe Lançon, uno de los super-
vivientes de la matanza del sema-
nario satírico Charlie Hebdo el 7 de
enero de 2015 y con una de las no-
velas más esperadas y alabadas de
este año. A decir de Silva, El colga-
jo, la novela en la que el escritor
galo da cuenta de aquel atentado,

«es una historia que deja huella,
conectada con las grandes histo-
rias de nuestro tiempo».
De esos 60 escritores que se acer-
carán a sus lectores en los diferentes
debates y encuentros que se celebra-
rán a lo largo de esta semana en
Getafe Negro, cabe destacar que la
mitad son mujeres. Acaso sea esta la
prueba de que el neofeminismo ha
calado dentro del género y tiene en
la novela negra una de sus mayores

formas de expresión. Sin embargo,
lo cierto es que los organizadores no
han obedecido a ninguna cuota. «Lo
que ocurre es que las mujeres cada
vez tienen una presencia mayor en
la novela negra española y, exami-
nando las novedades más relevantes
de estos últimos meses aparecen
una y otra vez», recuerda el comisa-
rio refiriéndose a escritoras como la
ovetense Ana Lena Rivera con su li-
bro Lo que callan los muertes, la do-

nostiarra Arantza Portabales con
Belleza Roja o la madrileña Laura
Orens con Hasta los andares, todas
ellas representantes de esa «nueva
cosecha» sobre la que gira el tradi-
cional primer encuentro en el Insti-
tuto Cervantes de Madrid.
Siendo la novela negra actual una
suerte de crisol a través del cual ca-
be interpelar al mundo entero, su te-
mática puede ser más que variada.
Esta edición de Getafe Negro se ha
articulado en torno a tres asuntos.
Uno será la revisión de la memoria
histórica a través de técnicas de re-
lato criminal, subgénero que va des-
de los títulos ambientados en la Es-
paña de Galdós hasta los situados
en la posguerra franquista. «Sus au-
tores están recurriendo a la novela
negra para abordar la memoria his-
tórica sin problemáticas».
El segundo de los asuntos a tratar
es el acercamiento a crímenes ver-
daderos sin el aparato de la ficción
entre medias, «lo que los anglosajo-
nes llaman true crime y aquí, en
tiempos, se llamó crónica de suce-
sos, aunque va más allá de la cróni-
ca periodística» y que ha vivido un
resurgir en los últimos tiempos.
La tercera línea temática de este
festival se refiere «a las nuevas for-
mas de criminalidad que han traí-
do nuestros tiempos».

El novelista Lorenzo Silva, especialista en el género y comisario de los encuentros de Getafe Negro. S. ENRÍQUEZ-NISTAL


El autor noruego Jo Nesbø, una de las atracciones del festival madrileño. AFP


Philippe Lançon, Marta
Sanz o Antonio Muñoz
Molina, entre las
grandes atracciones
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