Cuenta que los primeros bordados que solían hacer ella y
sus hermanas siempre eran para el papá. “Encontrábamos
que hacerle algo al papá era respetarlo, para que él dijera:
‘Mire qué bonito lo que hizo mi hija’, para que él estuviera
contento”. ¿Y a la mamá se le bordaba? le preguntamos.
BORDADOS
PARA EL PAPÁ