LIBRO DE LA SALUD CARDIOVASCULAR
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por células capaces de autoactivarse eléctricamente, gene-
rando de forma autónoma impulsos eléctricos.
Las aurículas se encuentran separadas entre sí
por un tabique muscular cardíaco que impide el paso de
sangre entre ellas. Sin embargo, ese tabique sí permite la
conducción de la electricidad, por lo que ambas aurículas
se activan y contraen de forma casi simultánea al trans-
mitirse libremente el frente eléctrico de activación entre
ellas. Cada aurícula comunica su sangre con un ventrículo
—grandes cavidades musculares del corazón cuya prin-
cipal función es bombear con energía la sangre que les
llega de cada aurícula—. El ventrículo derecho bombea
la sangre venosa a los pulmones para que se oxigene. El
izquierdo bombea la sangre que llega ya oxigenada de
los pulmones y la manda al resto del cuerpo. El ventrículo
izquierdo es la cavidad con una musculatura más gruesa
para poder eyectar con fuerza y presión la sangre que ten-
drá que llegar hasta el cerebro y a sitios tan lejanos como
los pies y las manos.
Para que el corazón funcione adecuadamente se
requiere que una zona genere los impulsos (nodo sinusal),
que el resto del tejido los transmita como si fuera un gran
cable ancho, pero sobre todo que el músculo de las cavida-
des se contraiga de forma sincronizada, no de manera errá-
tica. Primero se tienen que contraer las aurículas, vacián-
dose de sangre hacia los ventrículos, y poco después éstos
tendrán que contraerse de forma sincronizada y simultá-
nea bombeando la sangre recibida al resto del cuerpo. Tras
una breve pausa, tanto las aurículas como los ventrículos
estarán listos para contraerse en un nuevo ciclo las veces
que sean necesarias por minuto. Esto implica que aurícu-
las y ventrículos no deben latir de forma independiente
pero tampoco simultánea; si esto sucediese, las aurículas
bombearían contra los ventrículos ya cerrados por su pro-
pia contracción y no podrían mandarles la sangre. Por ello,
en la unión entre aurículas y ventrículos no se conduce la
electricidad directamente de célula a célula como en el
resto del corazón. El frente eléctrico que viene por las aurí-
culas se transmite a través de una única estructura que se
comporta como un pequeño cable lento, capaz de retrasar
durante la quinta parte de un segundo el paso de la elec-
tricidad generada en las aurículas a los ventrículos. Este
cable lento se denomina nodo auriculoventricular, y de ahí
el impulso ya saldrá a gran velocidad (hasta 4 m/s) hacia
un único cable entre las aurículas y los ventrículos llamado
haz de His, que a su vez se bifurcará en sus dos grandes
ramas, una para cada ventrículo. Estas ramas dan lugar a su
vez a una miríada de fibras o terminales eléctricos reparti-
dos difusamente por los ventrículos, de tal manera que el
frente eléctrico que ha salido retrasado por el nodo auricu-
loventricular desde su origen en las aurículas acaba acti-
vando los ventrículos en múltiples sitios simultáneamente.
Cada uno de estos múltiples frentes eléctricos se transmi-
tirá pasivamente de célula a célula ventricular a velocida-
des de alrededor de 1 m/s hasta activarse todo el tejido de
los ventrículos. Así se consigue una contracción de ambos
ventrículos de forma simultánea, sincronizada y retrasada
respecto a las aurículas, dando tiempo a que éstas vacíen
su sangre al contraerse contra unos ventrículos relajados.
Cuando el ritmo cardíaco depende de las activacio-
nes eléctricas generadas en el nodo sinusal será denomi-
nado ritmo sinusal. Este ritmo es el normal en la inmensa
mayoría de la población, con frecuencias que oscilan de
forma muy variable en reposo entre 50-80 lpm y que lle-
gan en máximo esfuerzo hasta aproximadamente 220 lpm
en niños y hasta unos 140 lpm en personas de 70-80 años.
En corazones de sujetos deportistas estas frecuencias son
habitualmente menores dado que su organismo regula
mejor la demanda de oxígeno para un mismo esfuerzo y
FIGURA 1. Anatomía cardíaca
Vena
cava
Arteria
aorta
Arteria
pulmonar Ventrículo
izquierdo
Ventrículo
Aurícula derecho
derecha
Nodo
sinusal
Nodo AV
Haz de hisRama izquierda
Rama derecha
Modelo plástico del corazón que muestra las cavidades cardíacas y las
zonas claves en la propagación de los impulsos eléctricos cardíacos.
Se muestran la posición anatómica del nodo sinusal y el nodo auricu-
loventricular en la aurícula derecha, el haz de His por dentro de los
tabiques musculares cardíacos y sus dos ramas: una discurre por el
ventrículo derecho y la otra atraviesa la zona interventricular para ir
al izquierdo.