37 EL DILEMA DE LOS FILÓSOFOS
En varios de mis libros he tratado de explicar con detalle todos
los pormenores de la teoría de las excepciones de la justicia, la
razón de hacerlo no es porque crea que es cierta
necesariamente, sino porque desde el comienzo de los tiempos
es común tanto en los animales como en las personas que la
mayoría no sean justos de forma completa, aunque solo una
minoría de ellos lleguen a convertirse en canallas o criminales.
Esta es la razón por la que es necesario tratar de comprender si
puede tener un sentido científico o social. También es bueno
estudiar todos sus detalles para intentar explicar de forma
metafísica por qué ocurre y como se puede controlar. Porque la
verdad es que la mayoría de la gente no es justa siempre aunque
no lo quieran reconocer. Es decir, que de lo que se trata en
definitiva es de intentar averiguar la diferencia entre el bien, el
mal, la justicia y la injusticia desde un punto de vista científico,
para que podamos controlarlo y entender cuáles son los límites
en los que nos podemos mover.
No sé con seguridad, si el destino de la humanidad es ser
completamente justa o es ser justa con excepciones, pero mi
conclusión es que, en cualquier caso, la justicia tiene que ser el
eje de la conducta moral para que las personas puedan convivir
de forma estable. Yo creo, sinceramente que la justicia total es
preferible, porque el hecho de que en el pasado la justicia total
no se haya aplicado de forma general en la sociedad puede
deberse a que un mundo en proceso de evolución solo es capaz
de comprender las circunstancias con una perspectiva muy
inmediata y corta de tiempo, lo que impide que se puedan
entender las circunstancias de forma global o pensando en el