EL MUNDO.
HOJA Nº (^28) P A P E L JUEVES 5 DE SEPTIEMBRE DE 2019
F O T O G R A F Í A
Fue el padre del
fenómeno de las
supermodelos, el hombre
que revolucionó la
fotografía de moda,
defensor de la belleza
espontánea y del blanco y
negro. Tenía 20.000 fotos
en su iPhone, apreciaba el
arte de José Tomás,
practicaba la meditación
y de joven peregrinó a
Arlés porque quería ser
artista como Van Gogh.
Peter Lindbergh, alemán
residente en Francia,
murió el martes pasado a
los 74 años.
La familia comunicó su
fallecimiento en una nota
a la agencia France Presse
que no detalla ni el lugar
ni las circunstancias. Su
cuenta en Instagram
acompañó el mensaje con
una foto de un estudio
vacío.
Activo hasta el final,
fotografió a la cantante
española Rosalía para la
portada de Vogue y
participa en el número de
septiembre de la edición
británica del mismo título
que ha coordinado
Meghan Markle y para el
que retrató a varias
famosas, desde Salma
Hayek a la joven luchadora
medioambiental Greta
Thunberg.
Lindbergh fue el pionero
del nuevo realismo en la
fotografía de moda. Su
revolución rompió moldes
con una serie de varias
modelos, entonces
desconocidas, vestidas con
una simple camisa blanca.
Sin artificio, con el pelo
recogido. Era 1988. Y la
playa, Malibú. «Retoco
muy poco mis imágenes,
no quiero deformar ni
masacrar a las mujeres»,
explicó hace unos años a
un grupo de estudiantes.
Fotografiadas en blanco y
negro, en actitudes
naturales ajenas a las
artificiales poses de
antaño, las mujeres de
Lindbergh «recuperaban
una humanidad que los
códigos de la fotografía de
moda habían ocultado».
La cita corresponde a la
presentación de su última
gran exposición dedicada
a... las esculturas de
Giacometti. En la
Fundación que lleva el
nombre del escultor en
París casi no se cabía
aquella noche fría de
invierno, enero de este año,
hasta el punto que el cóctel
inaugural se servía en la
calle con un foodtruck
aparcado junto a la acera.
El fotógrafo que
inmortalizó a modelos
como Naomi Campbell,
Cindy Crawford, Linda
Evangelista, Claudia
Schiffer, Kate Moss o
Kirsten Owen y actrices
como Nicole Kidman,
Julianne Moore, Uma
Thurman o Jeanne Moreau
se enfrentó a los bronces y
escayolas escuchimizadas
de Alberto Giacometti.
Esculturas y modelos,
en blanco y negro, con
bastante grano. «El blanco
y negro es otra manera de
reflejar la piel. Salta a la
luz el menor detalle y la
foto se convierte
rápidamente en un
retrato», sentenció en
Paris Match.
A Lindbergh le gustó el
reto de fotografiar la obra
de Giacometti, nacido de
un encargo de Blau, el
suplemento de Die Welt,
hasta el punto de contar
que había sido una de las
tres jornadas más bellas
de su vida.
«Me costó definir la
sensación reinante.
Melancolía. Sin duda». El
sentimiento dominante en
la obra del artista. «Que
mis modelos no se rían no
quiere decir que estén
tristes. Un rostro
melancólico es más
expresivo que uno risueño.
Reír es una expresión
única, no se puede
imaginar ninguna otra
POR IÑAKI
GIL PARÍS
LA
VERDAD
DE LA
BELLEZA
Muere Peter Lindbergh. El fotógrafo que
lanzó el fenómeno de las supermodelos
de los años 90 fue el pionero de un nuevo
realismo en los editoriales de moda que
devolvió la naturalidad a la mujer
MUERE EL FOTÓGRAFO
PETER LINDBERGH
Peter Lindbergh, fotografiado durante el montaje de una exposición dedicada a los Rolling Stones. SEBASTIEN MICKE / PARIS MATCH / GETTY IMAGES