Entre las medidas que se aplican a las conductas individuales, algunas
políticas presentan una probabilidad de operación inmediata, como es
el caso de la eliminación de bienes de mala calidad, de la lucha contra
la competencia desleal o la publicidad engañosa. Estas políticas son
llamadas «reguladoras» porque imponen medidas reglamentarias o
normativas. Otras políticas, como la asignación de tierras, los subsidios
o los derechos de aduanas y aranceles, son llamadas “distributivas”
(...) El caso del control de créditos, de los impuestos progresivos o de
la seguridad social, estas políticas son llamadas «redistributivas »...
Políticas que tienen una probabilidad de coerción lejana, como esel
caso de la creación de nuevas agencias públicas, de la propaganda de
gobierno o de medidas que trascienden a varios sectores de actividades.
Estas políticas, son llamadas “constitutivas” (p. 26).
Este es un panorama muy complejo que tienen
que enfrentar los gobernantes para implementar políticas,
porque aunque exista el consenso necesario para llevarlas
a cabo, siempre existen grupos minoritarios que no
coinciden ideológicamente con el gobierno o porque son
afectados directa o indirectamente y están en contra. Sin
embargo, para evitar descontentos los funcionarios tienen
herramientas para buscar disuadir el descontento; entre ellas
está una buena negociación política, pero sobre todo cuenta
con las instituciones formales e informales que sirven para
coaccionar jurídicamentey para que la misma sociedad
mayoritaria por medio de mecanismos no escritos repruebe
a las minorías inconformes. En esta lógica Rivas (2003)
considera que:
Las instituciones, en un sentido amplio, son las reglas, normas, costumbres
de operación del sistema; son al mismo tiempo las organizaciones,
redes o la misma opinión pública que sirven paraenlazar y encauzar
institucionalmente las relaciones de intercambio económico, social y
político entre los subsistemas o distintos componentes del sistema (p.
39).