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LA ENFERMEDAD CARDIOVASCULAR EN EL TRASPLANTE RENAL
coronarias, que arrastran desde que tenían una insuficien-
cia renal en grado moderado-grave.
Por ello, la prevención de la mortalidad cardiovas-
cular debe desarrollarse, al menos, en la época de insufi-
ciencia previa a la diálisis, controlando todos los factores
relacionados con la insuficiencia renal y con la patología
cardiovascular, comentados en otro capítulo de este libro.
Después del trasplante renal también es posible
actuar sobre algunos de estos factores para prolongar
la supervivencia del injerto y disminuir la morbilidad
cardiovascular del paciente trasplantado. El ajuste del
tratamiento inmunosupresor utilizando combinaciones
que logren mini mizar el desarrollo de factores de riesgo
cardiovascular y la toxicidad sobre el injerto renal es uno
de los puntos más relevantes en este aspecto. Asimismo,
el tratamiento y la prevención de la obesidad, el con-
trol de la glucemia (valores de glucosa en sangre) y la
deshabituación tabáquica son puntos fundamentales
en la profilaxis de la mortalidad cardiovascular en este
paciente. Los factores de riesgo cardiovascular ya exis-
tentes (HTA, dislipemia y diabetes, entre otros) deben
tratarse de forma muy rigurosa en el paciente trasplan-
tado renal, pues comportan para él mayor riesgo de
morbimortalidad que en la población general.
Factores de riesgo cardiovascular
El paciente trasplantado renal presenta una elevada preva-
lencia de factores de riesgo cardiovascular. HTA, dislipemia,
hipertrofia ventricular izquierda, obesidad y diabetes están
frecuentemente presentes en el trasplantado renal y par-
ticipan de manera activa en la mortalidad cardiovascular.
En general, estos factores ya existen en el paciente incluso
antes de empezar la diálisis y es frecuente que hayan desem-
peñado un papel activo en el desarrollo de la enfermedad
renal, por lo que a menudo son imposibles de prevenir.
Una vez trasplantado, el propio tratamiento inmu-
nosupresor al que ha de someterse el paciente mientras
mantenga un trasplante funcionante puede participar de
manera directa o indirecta en el desarrollo de factores
de riesgo cardiovascular. La mayoría de los fármacos inmu-
nosupresores utilizados hoy tienen efectos secundarios
que pueden ser, en sí mismos, factores de riesgo cardiovas-
cular. Los esteroides, por ejemplo, se asocian fuertemente
con el desarrollo de la obesidad y la diabetes; los inhibido-
res de la calcineurina (ciclosporina y tacrolimus) generan
HTA; y los inhibidores de mTOR (rapamicina y everolimus)
inducen el desarrollo de dislipemia.
Hipertensión arterial y trasplante renal
La HTA es muy frecuente en los pacientes trasplantados
renales y llega a afectar hasta al 70-80% de ellos. Varios fac-
tores pueden contribuir al desarrollo de HTA en el paciente
trasplantado; los principales, los fármacos inmunosupreso-
res y la existencia de HTA previa al trasplante.
Los fármacos inhibidores de la calcineurina (tacro-
limus y ciclosporina) y los esteroides están presentes en
la práctica totalidad de las combinaciones farmacológicas
utilizadas actualmente como tratamiento inmunosupresor
en el trasplante renal. Ambos grupos de medicamentos
actúan sobre varios mecanismos capaces de desarrollar o
potenciar un aumento de la presión arterial: disminución
del calibre de los vasos sanguíneos, disminución del flujo
plasmático renal y retención de agua y sal, e intolerancia
hidrocarbonada con desarrollo de diabetes.
La actitud terapéutica que habitualmente se toma
está encaminada a disminuir los efectos secundarios de
estos fármacos, sin prescindir de su excelente efecto inmu-
nosupresor, ajustando su dosificación al momento postras-
plante (por ejemplo, retirar los corticoides en los primeros
meses tras el trasplante). Asimismo, en pacientes seleccio-
nados se suelen sustituir esos fármacos por otros con menor
potencia inmunosupresora, pero también con menos efec-
tos secundarios cardiovasculares.
La estenosis de la arteria del injerto (estrecha-
miento de la luz de la arteria del trasplante renal en alguno
de los puntos de su recorrido) puede condicionar el
FIGURA 1. La enfermedad cardiovascular
Tratamiento
inmunosupresor
Disfunción del injerto
Estilo de vida
Enfermedad original
Dieta
Sobrepeso
Sedentarismo
Tabaco
Diálisis
Hipertensión arterial
Hiperlipemia
Diabetes
Infecciones
Hipercoagulabilidad
Enfermedad
cardiovascular
Hipertensión arterial
Hiperlipemia
Hipertensión
Anemia
Hipertrofia
ventricular Diabetes
Enfermedad
autoinmune
Edad
Sexo masculino
Factores genéticos
Factores
no modificables