—A continuación les leeré las condiciones que textualmente expresa
el documento.
››Condición N.1: los reclusos deben ser personas cuya reinserción
social fuera inviable.
La gobernante explicó el texto, diciendo: esto básicamente
significaba que esa gente contendría un nivel tan alto de brutalidad y
agresividad, que imposibilitaría su liberación. Gracias a eso nos deshicimos
de muchas lacras que corrompían esas ciudades, más de lo que ya estaban,
claro.
Ella siguió leyendo.
—Condición N.2: los criminales no serán tratados como seres
humanos, sino que se les dará un rango que esté al mismo nivel, o incluso
por debajo de los animales.
Celia explicó el segundo punto, diciendo: esta condición la
plantearon por cuestiones éticas. Con el fin de facilitar aún más la
viabilidad del proyecto, los líderes concluyeron que sería más aceptable si a
los reos no se les consideraba seres humanos. De esa manera ellos
quedarían exentos de futuros juicios legales por los siguientes emperadores.
La gobernante siguió leyendo el texto.
—Condición N.3: a los efectos de garantizar la mayor efectividad
posible, el proyecto será completamente confidencial.
Ella explicó, diciendo: únicamente los líderes políticos, y los
científicos involucrados, debían saber acerca de esto.
Las declaraciones de Celia penetraban como espadas afiladas hacia
los oyentes. Lucas tuvo que desactivar su casco para poder vomitar. Lu
estaba cada vez más asqueado. En ese punto, a Morgan ya no le sorprendía
nada; él sabía que, al igual que Caluti, los Raxanes eran capaces de hacer
cualquier cosa por sus propios intereses.
Kun presionaba ambos puños con mucho odio, y Samuel tenía una
expresión de horror en su rostro. Esmeralda solo confirmó lo que ya había
estado sospechando meses atrás.
La periodista y el camarógrafo lloraban de impotencia. Los policías
se veían decepcionados y con sentimientos de vergüenza y asco, sabiendo
que todos ellos estaban sanos gracias al sacrificio de los pigmentados.