—Iré con el señor Caluti y me haré pasar como su aliado. Morgan,
sinceramente no creo que ganemos esta batalla ahora mismo, así que sería
mejor para todos que uno de nosotros esté cerca del enemigo.
—¿Estás seguro, Lu? Tú mismo has dicho que Caluti es capaz de
hacer cualquier cosa.
—Considerando que estamos en desventaja, no se me ocurre otro
plan. Solo observa a tu alrededor, llevará un tiempo acabar con todos estos
policías. Sé que tú eres rápido, pero no lo suficiente como para detener al
señor Caluti antes de que pulsara el interruptor, y además, también está
eso...
Lu señaló con la cabeza en dirección a la caja gigante. Morgan miró
disimuladamente con el rabillo del ojo.
—En esa caja se oculta un coloso llamado Nordok, es bastante
fuerte, y lamentablemente no he tenido tiempo de observarlo lo suficiente.
Por eso no sé qué tan peligroso sea.
››El punto es que todo juega en nuestra contra ahora mismo.
Morgan, si cometemos un mínimo error, por más insignificante que sea...,
ten por seguro que fracasaremos.
—Entiendo. Es un buen punto, sin embargo, ¿y si lo de las bombas
fuera mentira?
—También lo barajé, pero aún con eso... pienso que no sería una
buena idea matarlo aquí. Él nos mencionó, a Lucas y a mí, algo acerca de
una cueva en las montañas de Pligia. Quiero saber más sobre eso, y
posiblemente el señor Caluti sea el único que tenga el conocimiento para
llegar a ese lugar.
Morgan cruzó sus brazos mientras debatía dentro de sí.
Si no tuviéramos las bombas, pienso que matar a Caluti sería la
mejor opción, pero Lu no diría algo tan riesgoso si no fuera importante
para él.
El limario tomó una decisión.
—De acuerdo, haremos lo que digas.
—Gracias, confía en mí, pero mantén esto en secreto de los demás.
Kun y Lucas podrían echarlo todo a perder.
—Está bien. ¿Cómo lo haremos?