—¡No!... ¡No tengo idea de nada! —respondió él, todavía adolorido
mientras tocaba sus hombros y hacía movimientos leves con el cuello.
Hmmm... Entonces... ¿Quién?, pensaba Boldort, de repente, abrió el
ojo y preguntó seriamente.
—Morgan. ¿Has tenido desmayos o amnesia?
—Sí... —respondió un poco avergonzado.
—Ahora entiendo... —Boldort sonrió—. Ese Caluti es un verdadero
hijo de puta. Logró desarrollarla dentro de tu cuerpo.
—¡No diga eso de mi pad... —Morgan hizo una pausa. Luego
preguntó—: Espera... ¿Desarrollar... qué cosa?
—Niño... Tú posiblemente tienes otra personalidad dentro de ti.
Morgan y Esmeralda se sorprendieron al escuchar eso.
—¿Eh? ¿Eso es posible? —preguntó ella.
—Siempre hubo una pequeña posibilidad —respondió Boldort.
—¡Yo no tengo dos personalidades! ¡Yo!... ¡Yo soy yo!
Los tres lucían desconcertados. Cuando de repente Samuel hizo un
comentario con el ceño fruncido.
—FARAC.
Todos voltearon a verlo mientras él miraba el suelo.
—Se llama FARAC.
—¿Qu... Qué quieres decir, Sam? ¿Por qué mencionas de nuevo ese
nombre? —preguntó Morgan bastante confundido.
—Morgan, tú tienes a otra persona dentro de ti. Se hace llamar
FARAC. Su nombre significa “Función Auxiliar de Respuesta Automática
Condicionada”.
Los tres lo miraban atentamente. Él continuó.
—Después de que el detective Cleman te disparó... tú te desmayaste,
y fue entonces cuando FARAC tomó el control de tu cuerpo.
Samuel alzó la vista y los miró con los ojos llorosos.—FARAC mató al detective Cleman... Lo mató de un solo golpe.
Morgan estaba en shock. No podía creer lo que escuchaba. El chico
siguió explicando.